A nivel de mecánica, todas las partes y piezas del coche son de vital importante; desde el tornillo o la tuerca más pequeña hasta el propio motor que le genera el movimiento al vehículo. Sin embargo, como hemos considerado anteriormente, todas esas piezas que conforman nuestro motor dependen unas de otras, y es muy importante que sigan una sincronía, para que trabajen a la perfección, como las grandes orquestas sinfónicas. Pero mantener los coches cuesta dinero, y su costo siempre dependerá del año, la marca del coche, y desde luego, del estado en el que se encuentre.
El sistema de refrigeración del motor
Entre todos los sistemas que conforman el auto encontramos uno en particular de gran relevancia, a saber, el sistema que mantiene la temperatura adecuada del motor. Este sistema está conformado por una serie de partes y piezas que se encargan de distribuir el líquido a lo largo de las tuberías, para que mantengan frescas las paredes del propulsor; desde el recipiente del líquido, hasta pasar por la bomba, el radiador, válvulas de temperatura y las mismas mangueras, todo trabajando de manera ordenada, manteniendo fresco el bloque del motor y evitando que sus piezas internas se estropeen por las altas temperaturas.
Qué conforma el sistema
Ahora bien, a través de los años la mayoría de las personas han caído en una polémica con respecto a qué es lo mejor para mantener fresca la temperatura del motor, por lo que en esta oportunidad intentaremos aclarar cuán importante y beneficiosa es el agua o el líquido refrigerante. Para comenzar, es preciso saber que cualquiera de estos dos fluidos se usa para que el motor mantenga la temperatura más ideal, claro está, todo el sistema es apoyado por la válvula de la temperatura, que en este caso nos transmite información sobre el nivel de la misma, y además activa el electroventilador cuando es más conveniente.
Pero el sistema de refrigeración o temperatura también cumple con la función de mantener caliente el habitáculo, es decir, se encarga de activar lo que conocemos como la calefacción del coche; este sistema generalmente se utiliza en zonas muy frías, donde las temperaturas se hallan debajo de cero. La calefacción aprovecha el calor que se genera en el motor y la lanza, por así decirlo, mediante un ventilador a la parte interna o habitáculo; sin embargo, la interrogante sigue en pie, y aunque sabemos que el sistema de refrigeración mantiene a temperatura nuestro motor es preciso saber qué utilizar, agua o refrigerante.
Son necesarios los fluidos
Para comenzar, sin un fluido que se mueva a través del sistema sencillamente no tendríamos la temperatura más adecuada en el motor y nos recalentaríamos, de hecho, este líquido es quien absorbe el calor del propulsor. La historia de los motores nos indica que fue precisamente el agua el primer líquido que se utilizó para cumplir con este fin, es por ello que lo podemos catalogar como un líquido válido para el sistema de refrigeración; en cuanto a los anticongelantes o refrigerantes, estos se definen básicamente como agua, solo que contienen una serie de químicos que contribuye a que la refrigeración se dé de manera óptima.
El uso del agua como refrigerante
Felizmente, y para todos los que la utilizan, sí podemos utilizar agua como fluido refrigerante en nuestro coche, pero debe saber, que no se puede utilizar precisamente el agua del grifo y la razón es muy sencilla. El agua que sale de la llave generalmente contiene cal, y esa sustancia poco a poco se va concentrando en las partes internas del sistema y va obstruyendo la misma, hasta que toca destapar el sistema para poder limpiar las mangueras, el radiador, o en su defecto, sustituir estas piezas por otras nuevas.
Otro aspecto a tomar en cuenta si decidimos utilizar agua es que su estado será variable según la zona donde se viva; por ejemplo, habrá lugares donde hace mucho calor, por ende la temperatura del motor tenderá a subir mucho más, es en ese momento en que el agua puede evaporarse más rápido. El caso contrario lo encontramos cuando vivimos o circulamos por zonas muy frías. En este punto, el agua del coche pudiera congelarse, hasta volverse una piedra de hielo. Es por ello que si decide usar agua la misma debe ser destilada, ya que no se recomienda utilizar agua del grifo.
Los líquidos anticongelantes
En el caso de los líquidos anticongelantes su función es totalmente distinta ya que, al tener una serie de sustancias químicas, estas evitan que se congele, o por lo menos soportan unos 30 grados bajo cero antes de congelarse, lo mismo ocurre con las temperaturas más altas, el líquido refrigerante soporta más calor que el agua, por ende tarda más en evaporarse. Al igual que ocurre con el combustible, es importante revisar periódicamente el nivel del agua o líquido refrigerante, recuerde que, cuando se encuentra en niveles muy bajos el coche pudiera recalentarse y ocasionar problemas mayores.
Con esta breve explicación nos queda claro qué es mejor utilizar para el sistema de refrigeración del coche, aunque a la final queda a decisión de cada quien. Recuerde, el agua tiende a sufrir dependiendo del estado del clima donde normalmente circulemos, pero el líquido refrigerante está compuesto de sustancias químicas que a la larga contribuyen con la vida de nuestro motor.
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