Alfa Romeo es uno de los más grandes fabricantes en el mundo del automóvil, caracterizado mayormente por sus elegantes diseños de lujo y siempre con altísimas prestaciones. Su historia data desde 1910, siendo fundada en Milán. Repasaremos los puntos más destacados del gigante italiano.
Fundación y primeros años
Apenas al iniciar el año 1910 apareció un grupo de empresarios que se hicieron cargo de una filial con instalaciones en Milán, propiedad de la marca francesa Darracq. Así nace en primer lugar Anonima Lombarda Fabbrica Automobili, de siglas A.L.F.A. Los coches de Darracq eran muy queridos por la gente en aquella época, sobre todo por el público italiano, razón por la que Alexandre Darracq monta esta filial en Nápoles, pero finalmente la trasladó a Milán.
El primer modelo de esta fábrica fue el llamado 24 HP que salió a la luz en 1911, gozando de bastante éxito mayormente gracias a su fiabilidad. Rebozados de confianza, mostraron después el 12 HP, un vehículo con grandes prestaciones, y el 15 HP Corsa. En 1913 llegó el que se podría decir que es el primer deportivo de la marca, el 40/60 HP y que se presentó en el mundo de las carreras, en este caso en el evento de Parma-Berceto, pudiendo lograr la victoria en su división.
Las cosas salían bien para A.L.F.A en aquel entonces, pero lamentablemente los signos alentadores no duraron demasiado. En muy poco tiempo, llegado el año 1915 la marca sufre una primera y gran crisis, lo que derivó en que esta cayera en manos de Nicola Romeo en su totalidad.
Aparición de Nicola Romeo
La Primera Guerra Mundial fue un momento en el que la fábrica recién obtenida por Nicola Romeo tuvo que detenerse algún momento, pero al terminar el conflicto se pudo retomar la producción original de esta compañía. Apenas terminada la guerra, Romeo asoció la Societá Anonima Nicola Romeo con A.L.F.A para que así naciera Alfa-Romeo Spa. Rápidamente llegó el primer modelo después de la guerra, el llamado Torpedo 20/30 HP de 4.2 litros, y después llegó el deportivo 20/30 ES. Se puede decir entonces, que desde este momento aparecieron los modelos con la denominación de Alfa Romeo.
En 1921 llegó el modelo llamado RL, que gozó de una enorme popularidad. Se trata de un 6 cilindros de 3 litros, que después tuvo algunos derivados con mayor potencia, el RLT y el RLS. El último es un deportivo que compitió en la Targa Florio de 1923, en la que Ugo Sivocci consiguió con Alberto Ascari el primer doblete de Alfa Romeo. Justo en ese año salió el RM, un 4 cilindros de 2 litros basado en el RL, pero mucho más económico. Tuvo tres versiones que alcanzaron un alto número de ventas. Hay una dolorosa parte en la historia de Alfa Romeo, en el momento que salió el P1, un modelo biplaza para las carreras, en el que Sivocci sufrió un accidente y perdió la vida. Debido a esto, el P1 jamás volvió a la competición. Ferrari apareció e hizo ingresar a un diseñador de FIAT llamado Vittorio Jano, con el que empezó una etapa dorada. Producto de esta unión apareció de primero el P2, que compartió la mayor cantidad de éxitos en aquella década con los Bugatti T35.
Vittorio Jano también diseñó el 6C-1500 del que se fabricaron 1.075 unidades hasta 1929, cuando llegó el 6C-1750, un modelo con mayor potencia aunque similar en cuanto al peso total. Este último fue muy importante debido a que logró salvar a la fábrica de una grave crisis en la que se vieron inmersos, provocando incluso que Nicola Romeo abandonase la compañía y esta pasara a manos de Ugo Ojetti.
De 1930 a 1940
Iniciados los años treinta, Alfa Romeo ya era un gigante en el mundo del automóvil, incluso consiguiendo ya en ese momento tener redes de venta y asistencia técnica en Francia, Inglaterra; España, Bélgica, Suiza, Austria y Hungría. La producción de la fábrica italiana se hacía más grande con la llegada de los primeros camiones y autobuses, pues empezó en 1931 con el autobús Bussing 50. El camión T85G destacó bastante al ganar en 1935 el concurso internacional para camiones, mientras que el modelo 500 podía llevar grandes cargas. Durante esta época, apareció Ugo Gobbato, quien se puso al mando de la compañía.
Lo más importante en la década de los 30 para Alfa Romeo fue el momento que vivieron en el mundo de las carreras, pues fueron los años de los pilotos más destacados. Entre ellos se encuentra a Hans von Stuck, Rudolf Caracciola, Louis Chiron y sobre todo el más destacado de la historia de Alfa Romeo, el mítico Tazio Nuvolari. Apartándose de las carreras, en 1933 llegó el modelo 6C-1900 de calle, mientras que después llegarían otros como el 8C-2300 y el 8C-2900. Este último fue un modelo bastante aceptado y elogiado, a pesar de tener una producción bastante limitada.
Durante la Segunda Guerra Mundial y después del conflicto
Un tiempo antes de iniciar el conflicto, Ugo Gobbato decidió pausar la mayoría de operaciones de la fábrica para concentrarse casi que totalmente en la construcción de motores aeronáuticos y los vehículos militares. Pero lamentablemente para Alfa Romeo, sus instalaciones fueron en gran mayoría usadas como puntos estratégicos o bombardeadas en múltiples ocasiones, por lo que la marca italiana quedó prácticamente en cero y cesaron definitivamente toda actividad. Después llegaron más eventos para lamentar, como las acusaciones a Ugo Gobbato por colaboracionismo de las cuales fue absuelto, y posteriormente su asesinato en una calle de Milán. Con esto, Alfa Romeo cayó en manos de Pasquale Gallo, quien consiguió retomar las actividades desde Julio de 1945.
Afortunadamente, la fábrica italiana consiguió una recuperación más rápida de lo que se pensaba, pues en ese mismo año 1945 sacaron el 6C-2500 Sport que ya estaba diseñado desde antes del conflicto mundial. Este modelo tuvo un total de 2.800 unidades fabricadas en tres versiones Turismo, Deportivo y Súper Deportivo. Eso sí, existieron algunas variantes como el 6C-2500 S Freccia d'Oro, o el 6C-2500 SS Villa d'Este.
El resurgimiento
A partir de 1950 y en adelante, Alfa Romeo cambió completamente su historia. La marca italiana se concentró en primero retomar completamente la producción de sus vehículos de calle, objetivo que lograron categóricamente. Apenas a lo que llegó el modelo 1900 obra de Orazio Satta Puliga (jefe de diseño) la suerte cayó a favor de la empresa. Este vehículo consiguió pasar los 190 caballos de potencia en sus variantes Súper y Súper Sprint, y se vendieron más de 20.000 unidades. Se puede decir que el modelo más destacado en esta época y por un largo tiempo fue el Giulietta Sprint, aunque también despertó bastante el sedán llamado Dauphine, producto de una colaboración con Renault.
Desde esta época también llego un momento dorado para Alfa Romeo en lo que al mundo del deporte se refiere, pues empezaron con las conquistas de Giuseppe Farina en 1950, y de Juan Manuel Fangio en 1951 en el recién estrenado campeonato de la Fórmula 1.
Años posteriores
Años más tarde, Alfa Romeo seguiría haciéndose grande. En la década de los 60 llegó el modelo Giulia que tuvo más de un millón de ventas, en los 70 hubo colaboraciones con Zagato y otros grandes italianos, mientras que en los 80 sufrieron una crisis de la cual rápidamente se pudieron recuperar. Para el año 2004 la marca italiana fabricó un total de 162.179 vehículos, mientras que en 2007 fueron 151,900, un poco menos.
Artículos recomendados