Nos subimos a nuestra particular máquina del tiempo para viajar a los años 80, ¿concretamente? A la antigua República Democrática Alemana. Eran tiempos de guerra fría, donde la URSS y EEUU vivían en constante tensión. Dejamos la historia política a un lado para descubrir los detalles del proceso de fabricación de un modelo que fue muy popular en la vieja RDA, y no porque fuera un éxito de ventas entre sus rivales.
La ciudad alemana de Zwickau fue testigo de la fabricación de miles de unidades del carismático Trabant. VEB Sachsenring tuvo la ardua tarea de motorizar a las personas que vivían en la Alemania Oriental, con un coche asequible, con un mantenimiento barato y de bajo coste de producción.
Materiales innovadores
Su carrocería estaba construida de duroplast (una resina reforzada con fibras de algodón), un material que años posteriores mostró problemas a la hora de realizar su reciclaje. Bajo su capó podemos encontrar un motor de dos tiempos de 600 centímetros cúbicos, que se ofrecieron en distintas potencias.
El Trabant se produjo durante treinta largos años sin recibir apenas cambios significativos en su diseño, aunque si contó con carrocería Combi para aquellos que necesitaban más espacio.
Antes de pasar al vídeo, y según he podido saber tras consultar a varias personas que vivieron durante esa época en la RDA, es que si querías un Trabant, debías soportar una larga lista de espera de hasta 10 años, dándose el caso a menudo de que los Trabant de ocasión eran más caros que los recién fabricados, debido a su disponibilidad inmediata.
Además del vídeo de su proceso de fabricación, añado uno de los "delicados" ajustes que recibían las puertas y capó antes de abandonar la factoría.
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