El Aston Martin Vulcan es el coche más radical que ha producido la marca en sus 102 años de historia. Es una bestia de 800 caballos extraídos de un motor V12 de, pon atención porque esto ya no es estándar hoy día, 7 litros de cilindrada. ¡7 litros! La combinación de fibra de carbono, magnesio y material cerámico para los frenos hacen que su peso sea de tan sólo 1.350 kg. Una auténtica bestia.
Su nombre puede resultar extraño, ya que Aston Martin suele utilizar una combinación alfanumérica para la mayoría de sus modelos. En Gaydon quisieron rendir homenaje al Avro Vulcan, un cazabombardero de los años 50 que sirvió en la Royal Air Force británica hasta mediados de los 80.
Desde entonces, una unidad del Vulcan B.2 XH558 se mantuvo en uso pero sólo en exhibiciones aéreas de la RAF, operadas por la fundación benéfica Vulcan To The Sky. A finales de este mes, el Avro Vulcan B.2 XH558 se retirará del servicio activo y celebrará su último vuelo antes de pasar a los libros de historia de aviación.
Para celebrarlo, Aston Martin ha querido reunir a los dos Vulcan para realizar una sesión fotográfica para el recuerdo en el aeropuerto Robin Hood (sí, no es broma) cerca de Doncaster. Este aeropuerto es precisamente donde opera la organización benéfica, que es también una academia de aviación.
Un nombre para la historia
El CEO de Aston Andy Palmer no ha querido dejar pasar la ocasión de pronunciar unas palabras: "el Avro Vulcan fue evidentemente una inspiración para nosotros a la hora de nombrar nuestro deportivo más radical y me complace ver que hemos sido capaces de unir a los dos Vulcans y rendir nuestro humilde tributo a esta obra maestra de la aeronáutica".
El piloto del bombardero ha sido el jefe de pilotos y director de operaciones Martin Withers: "volar a los mandos de esta joya ha sido memorable. Personalmente, me alegra saber que el nombre Vulcan [...] se mantendrá con este nuevo bólido de Aston Martin".
Las primeras unidades del Aston Martin Vulcan empezarán a entregarse antes de finales de año. Recordemos que el Vulcan no tiene homologación para su uso en carretera y, por lo tanto, es uno de esos juguetitos restringidos al circuito como el Ferrari FXX K o el McLaren P1 GTR.
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