Si a este apellido le unimos otra de las marca de ensueño como es Aston Martin, el resultado de la combinación, cuanto menos ha de ser excepcional como así es: el V12 Zagato.
Tras una presentación muy exclusiva a mediados del pasado año y la participación de una unidad preparada para las carreras, la cual hizo lo propio en otro de los circuitos con nombre mítico, Nurburgring en sus 24 horas de resistencia, hasta hace poco más de una semana no había habido un lanzamiento más o menos general y vino a ser en el Concurso de Elegancia desarrollado ni más ni menos que en Kuwait.
Si la parte delantera recuerda mucho a los Aston Martin más recientes, especialmente a los "ojos" del DB9, al mirar esa enorme "boca" es inevitable pensar que no es ni más ni menos que una reconstrucción actual del ultraexclusivo DB7 Zagato del que se produjeron 100 unidades y que no dejó de ser otra interpretación de principio de los años 2000 de los "DBx" que Zagato ha dibujado para la firma británica anteriormente. El de ahora no es ni más ni menos que una conmemoración de la primera colaboración allá por 1962 con el DB4GT Zagato
Donde realmente se centra la atención y, porqué no decirlo, las críticas al diseño de este modelo es en el alerón. Evidentemente, muy de carreras, pero ¿era necesario tan tan pronunciado ese aire racing? Si atendemos al debut del coche, una carrera tan dura, prestigiosa y selectiva como las 24 horas de Nurburgring, es evidente que sí pero ¿y si observamos la cantidad de coches que Aston Martin dice que producirá de este Z? Tan solo . Unamos esto a dónde fue presentado, tengamos en cuenta cuáles son los países donde actualmente más Aston se venden y que, allí hay una persona que, por no sufrir un dolor de cabeza eligiendo un color entre la gama de colores que ofrece el fabricante, elige uno de cada ¿en qué circuito y bajo qué condiciones serán usados, si es que se usan en alguna ocasión, estos exclusivos vehículos?
Desde que David Richards se hizo cargo de Aston Martin junto o por medio de un elenco de empresas árabes, las ediciones limitadas o tiradas reducidas de algunos modelos o directamente nuevos como el One-77 (el nombre se basa en que solo se produjeron 77) me parecen meros anzuelos para que aquellos que no tienen preocupación alguna por sus petrodólares adquieran a cualquier precio un coche que ya existe (el V12 de este Z es el mismo que el del Vantage) y así lograr sanear y reflotar la compañía.
Lícito negocio vender productos de calidad a precios elevados pero ¿de verdad este tipo de vehículos tiene algún sentido más allá que ser pieza de colección? ¿juguete a escala 1:1 que jamás será usado para lo que en principio sea diseñado? ¿objeto de exposición en un garaje del que jamás saldrá salvo cuando su dueño se aburra o necesite espacio para otro más exclusivo?
El Aston Martin más rápido jamás producido
Sea como fuere, los números de este vehículo son espectaculares: 150 unidades, 330.000 libras (un cambio aproximado de 420.000 euros) impuestos al margen, un motor de 6 litros, 12 cilindros en V, una potencia de 510 CV a 6.500 revoluciones, un par de 570 NM a 5.750 rpm, un 0-100 en 4,2 segundos y una velocidad máxima de 306 km/h indican que es el Aston Martin más rápido jamás construido.
La cadena de montaje ya ha comenzado a trabajar en los primeros Z y se espera que estén disponibles en las manos de sus exclusivos propietarios allá por junio.
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