Con un motor de 2.0 litros turboalimentado es capaz de producir hasta 280 CV logrando alzarse con el meritorio trono de ser el Astra más potente de la historia de Opel y rivalizando con iconos de las dos ruedas motrices como el Ford Focus RS de 300. Otro dato a tener muy encuenta es el par máximo capaz de desarrollar, 400 Nm, y alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h. A estos datos hay que tener en cuenta la combinación con el chasis electromecánico FlexRide, que incorpora los modos de conducción Sport y OPC lo cual le dota de un gran versatilidad y eficacia.
Estéticamente este OPC irradia bastante más agresividad que su predecesor siendo la trasera tremendamente atractiva con sendas colas de escape separadas y en la delantera destaca el diseño de una parrilla de tipo "panal". Su vista lateral cautiva ya que da la sensación de ser más achatado que el GTC del que parte gracias también al ajuste de la suspensión que lo aproxima al suelo.
Para este nuevo Astra OPC se han tenido en cuenta detalles como los nuevos asiento de tipo baquet que, no solo mejorar la sujección de los ocupantes sino que son un 45% más ligeros que los asientos convencionales.
A prueba en el circuito más exigente del mundo
El desarrollo de este Astra extremo ha sido sometido al trazado más duro del mundo: el circuito de Nurburgring y para ello han contado con el piloto ganador de las 24 horas de Le Mans de 1999, Jo Winkelhock. Opel data en 10.000 km los realizados en el Nordschleife lo que dicen equivaler a 180.000 kilómetros de conducción en carreteras convencionales.
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