Durante los últimos años mucho se ha especulado acerca del lanzamiento de un nuevo Audi de carácter deportivo. Tiempo atrás sonaron campanas con la posible llegada al mercado de un Audi R10, posicionado por encima del R8 y haciendo uso de la plataforma y mecánicas del Lamborghini Aventador. Desde entonces no se ha vuelto a escuchar nada al respecto, pero lo que si parece cobrar vida es el proyecto R6, a medio camino entre un TT y el ya mencionado R8.
Según afirman en Autobild, el proyecto ya ha recibido un nombre en clave, PO455 y estaría fuertemente ligado a la recién estrenada generación del Porsche 718 Boxster/Cayman. De esta forma, estaríamos ante el segundo deportivo con motor central de la marca de los cuatro aros aunque a diferencia del Porsche, el Audi R6 irá equipado con un sistema de tracción integral Quattro y motores de la propia compañía.El principal problema que se presenta en la utilización de la plataforma del Porsche 718 Boxster/Cayman es que desde un principio ha sido diseñada para mecánicas en posición boxer, con un tamaño reducido y permitiendo conseguir un centro de gravedad bajo. Por el momento Audi no cuenta con propulsores de este tipo, aunque si con motores de 2 y 2,5 Litros de cubicaje al igual que el Porsche, por lo que tal vez deberían adoptar una nueva posición en el vano motor.
También habrá que ver las facilidades que pueda aportar esta plataforma de cara a instalar un sistema de tracción integral Quattro, necesario en todo Audi de carácter deportivo. La caja de cambios, al igual que el Porsche y otros modelos de la firma, será automática de doble embrague con siete relaciones y levas tras el volante. Por el momento es pronto para hablar de prestaciones, pero su bajo peso apoyado con potencias cercanas a los 400 CV deberían hacer de este vehículo todo un deportivo a tener en cuenta en un futuro a medio plazo.
A simple vista no parece una jugada maestra por parte de Audi y es que el mercado de los deportivos no solo es pequeño si no que la fuerte llegada de los diferentes SUVs les está haciendo perder cuota de mercado. Autobild afirma que a pesar de entrar en un mercado saturado todo parece un plan del Grupo VAG que le permita distribuir los costes de la nueva plataforma del Boxster/Cayman, utilizando una estrategia de economías de escala, al igual que ocurre con la gran mayoría de modelos de la marca alemana.
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