El Audi R8 GT Spyder ya es una realidad. Después del éxito del Audi R8 GT, la versión aligerada y potenciada del deportivo alemán, la marca de los cuatro aros ha desvelado la versión cabrio de este, el Audi R8 GT Spyder. Su producción estará limitada a 333 unidades, las mismas que se produjeron del R8 GT.
Sometido a una importante dieta de adelgazamiento
Pesa en total 1.640 kg, 85 kg menos que el R8 Spyder normal. Esto se ha logrado, entre otras cosas, gracias a la utilización de fibra de carbono reforzada con polímeros (CFRP) en la tapa del motor, tapa de la capota y laterales de la parte trasera, con lo que ahorra 5,5 kg; sustituyendo los asientos originales por unos tipo báquet en GFRP (fibra de vidrio reforzada con polímeros), adelgazando así 31,5 kg. De forma opcional se puede incluir un deflector de viento trasero hecho en CFRP, que aligera aún más el peso.
La gran diferencia respecto al R8 GT es la ausencia de techo, que se sustituye por una clásica capota de lona, que tarda 19 segundos en accionarse, una operación que se puede hacer circulando hasta a 50 km/h. Esta capota se guarda bajo la cubierta del motor, otro de los elementos que diferencian esta versión de la coupé.
Por dentro, es muy similar al R8 GT, eso sí, sin techo, pero con los mismos detalles, como logotipos exclusivos que se utilizan tanto en el panel de instrumentos, cuyas esferas ahora son blancas, como en el volante y en las alfombrillas. El color de la carrocería se traslada al interior en zonas como los apliques de las puertas o los laterales del túnel de la transmisión. El Alcántara predomina en todo el habitáculo, recubriendo el volante, los montantes del parabrisas, los asientos o el tirador del freno de mano.
560 CV distribuidos a las cuatro ruedas
Lo más interesante de este modelo es el motor, un V10 5.2 FSI con la misma especificación que en la versión cerrada. Su potencia es de 560 CV, con un par máximo de 540 Nm a 6.500 rpm. Tiene una relación peso/potencia de 2,93 kg/CV. Con todo, el Audi R8 GT Spyder acelera de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y tiene una velocidad punta de 317 km/h (0,2 segundos y 3 km/h más lento que el coupé).
El bloque V10 se asocia a una caja de cambios R tronic de seis relaciones con dos modos automáticos y uno manual, permitiendo hacer cambios de apenas décimas de segundo cuando se utilizan las levas del volante o la palanca del cambio. Incorpora la famosa tracción total Quattro de Audi y se apoya en un diferencial trasero de deslizamiento limitado. Los neumáticos de serie son 235/35 R19 delante y 295/30 R19 detrás y la suspensión está rebajada 10 milímetros. Para frenar utiliza unos potentes discos de freno carbonocerámicos ocultos tras las llantas de 19 pulgadas.
A falta de saber el precio en España, en Alemania costará 207.800 euros, 14.800 euros más caro que el R8 GT Coupé. Es posible que se presente en el Salón de Frankfurt, y es casi seguro que las 333 unidades se agoten muy rápidamente, como ya ocurrió con el coupé.
Artículos recomendados