La relación entre BMW y Toyota nos han deparado algunos de los rumores y adelantos más jugosos de los últimos años, gracias sobre todo al renacimiento del emblema Supra y la presentación del Toyota FT-1 concept, diseñado en el estudio de diseño de Toyota de California y al que todos damos por hecho como la base del futuro Supra.
Pero a pesar de la magnitud de esta noticia, hoy hemos descubierto otro rumor sobre un proyecto de mayores dimensiones si cabe, ya que de esta misma colaboración entre las dos marcas, podría nacer una nueva serie de superdeportivos de ambas marcas, en el caso de Toyota, el sucesor espiritual del super tecnológico Lexus LFA.
Según la publicación australiana Motoring, publicación que dispone de muchas conexiones con las marcas japonesas, tanto Toyota, a través de Lexus, como BMW estarían muy interesadas en contar próximamente con un modelo en el segmento de superderpotivos, al igual que Audi con su deportivo R8, del que Audi acaba de presentar la segunda generación contando con la misma plataforma que el Lamborghini Huracán.
Según la mencionada publicación, ambas marcas habrían desarrollado un nuevo prototipo común que contaría con un bastidor de tipo cuna, fabricado en fibra de carbono, con un motor central de combustión. Apoyando a este, habría dos motores eléctricos que estarían alojados en el eje delantero, en un subchasis de aluminio, para impulsar las ruedas del eje delantero. Esquema similar al del nuevo Honda NSX.
A pesar de ser un desarrollo conjunto, los distintos modelos de ambas marcas se diferenciarían por el tipo de mecánica de combustión tradicional, un posible seis cilindros de doble turbo en el caso del modelo bávaro y un V8 derivado de la mecánica empleada en el Toyota TS040 de Le Mans, un ocho cilindros de 3.7 litros. En el caso del Toyota dispondría de una potencia que rondaría entre 800 y 1.000 CV combinando ambas mecánicas.
La arquitectura monocasco de fibra de carbono nos recuerda a la que ya emplea BMW en el híbrido i8, por lo que probablemente podamos encontrarnos finalmente con una versión deportiva similar a este en la futura gama de la marca alemana. Ambos modelos, al contrario que el carísimo y limitado LFA de más de 400.000 dólares, llegarían al mercado con una etiqueta que rondaría los 200.000 euros.
Fuente: Motoring
Artículos recomendados