El 3.0 CSL original debutó en competición hace ahora 40 años en el espectacular campeonato IMSA americano, obteniendo su primera victoria esa misma temporada, en las 12 Horas de Sebring. A ese triunfo le siguieron más victorias, incluida la de la carrera celebrada ese año en el circuito de Laguna Seca, situado a 25 kilómetros escasos precisamente de Pebble Beach.
Debido a esto, BMW ha presentado el nuevo 3.0 CSL Hommage R en Pebble Beach, decorado con la librea deportiva que caracterizaba a los deportivos de la marca aquella época. Con los colores de BMW Motorsport sobre fondo blanco.
Diseño
La silueta del 3.0 CSL Hommage se acentúa con la nueva decoración. La librea deportiva de BMW M nos transporta a otra época, ayudados sobre todo por las líneas del propio modelo actual, que no es otra cosa que al reinterpretación de las formas originales del 3.0 CSL de 1975.
A pesar de su evidente estética retro, en el pliego de condiciones del nuevo modelo los ingenieros han tenido muy en cuenta el interior del vehículo, más que las formas musculadas y voluptuosas del prototipo. Tomando como centro del diseño el puesto de conducción, según BMW "llevando a los diseñadores primero al casco del piloto, al mono de carreras y al asiento, antes de pasar a las líneas y superficies del interior".
De hecho, presentan junto al concepto un mono para el piloto con costuras iluminadas a la altura de los brazos. De las cuales aun no han presentado más imagen que un dibujo, en el que todavía no se aprecian dichas costuras iluminadas.
Técnica
Aparentemente, los únicos cambios con respecto al 3.0 CSL Hommage que vimos en el Lago Como se circunscriben a la decoración exterior, además de una estructura antivuelco no descrita en la presentación del 3.0 CSL Hommage original y que ahora declara la marca en forma de jaula antivuelco integrada en la estructura del techo del coche. Pero que en las imágenes del interior no se puede apreciar a simple vista.
Al respecto de la mecánica, la firma alemana vuelve a no dar información, por lo que o bien no está planificada y el modelo es estático y carece de motor o bien lo mantienen en secreto por alguna razón.
Pero la verdadera razón de ser de ambos 3.0 CSL Hommage, por el momento, es mostrar la exuberante estética de su carrocería, redibujando los trazos originales del 3.0 CSL de los setenta, incluido el mayúsculo alerón trasero, que remata un cuerpo plagado de músculos.
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