Diversas teorías surgieron con la aparición de las imágenes del prototipo en una publicación online china, que afirmaba que habían aparecido en el registro de patentes chino. Lo que hizo despegar la imaginación de más de uno, entre ellos nosotros mismos, asumiendo que existía la posibilidad de que finalmente fuera un modelo destinado a producción o al menos a representar un futuro concept car de la marca germana.
Una de las opciones más extendidas afirmaba que se trataba de un próximo integrante de la serie i de BMW, probablemente el futuro y esperado i5. Ya fuera como un eléctrico puro o un híbrido tradicional, dotado de un motor de combustión a modo de generador, ya que la existencia de tapas en el lateral indicaba que el modelo podría disponer de algún tipo de combustible, aunque también podría ser la simple tapa de la toma de corriente en el caso de que fuera eléctrico o híbrido enchufable.
Lo cierto es que según una fuente interna de la marca, el modelo que aparece en las imágenes es un mero prototipo de desarrollo, un vehículo laboratorio dotado de tecnología de pila de combustible alimentada por hidrógeno, pero que no derivará en un modelo de producción. Modelo de hidrógeno que no veremos finalmente hasta que termine esta década.
Y para el que, por la información que viene desde Munich, este modelo tan solo sirve como prototipo de pruebas del que se han patentado diversos elementos. El futuro vehículo alimentado por hidrógeno de BMW será un sedán con una autonomía estimada en torno a los 700 kilómetros.
La tecnología del futuro modelo compartirá tecnología con el actual vehículo de hidrógeno de Toyota, el Mirai, en virtud del acuerdo de colaboración entre ambas compañías y que entre otros proyectos dará vida al sucesor del Toyota Supra y la nueva generación del Z4.
Fuente: BMWBLOG
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