Cuando hablamos de los coches más potentes del mundo no podemos dejar a un lado aquellos que se han ganado su fama a base de trabajo y mucho esfuerzo, un ejemplo de ello son las marcas fabricantes de coches más famosas como Aston Martin, Lamborghini, Ferrari, Mercedes-Benz, Jaguar, entre otras. Nadie puede negar que se trata de coches muy potentes, esos que son capaces de elevar nuestra adrenalina hasta su máxima expresión. Para muchos estos vehículos son coches de carreras pero adaptados a la calle, a nuestro día a día, algo que en sí resulta muy difícil porque, ¿quién tiene un súper deportivo y no busca la manera de exprimir todo su potencial?
La respuesta es obvia, no podemos conducir un Mclaren y conducirlo como un Volkswagen Escarabajo, es una bestia que pide velocidad y nosotros nos unimos a ese sentir. Ese será el caso de la nueva invención de la casa fabricante Brabham Automotive, un vehículo de grandes cualidades mecánicas al que denominaron Brabham BT62. Este modelo nació específicamente para ser utilizado en las pistas de competencia, por lo que no tendremos la oportunidad de verlo circular por alguna de nuestras calles y avenidas, almenos que alguien con grandes capacidades económicas se le ocurra comprarlo y adaptarlo para tal fin.Los detalles a nivel estético del coche
Pero pasando de lleno en el nuevo Brabham BT62 debemos destacar que se trata de un bólido hecho para correr y para ganar, su solo aspecto es amenazador, es radical, es intimidante. Se nota que los ingenieros trabajaron arduamente para producir un vehículo que a simple vista irradia mucho poder, de hecho intimidaría a cualquier rival. La carrocería de este coche está hecha en fibra de carbono, por lo que debemos pensar que se trata de un vehículo liviano, con poco peso, para devorarse los principales trazados de todo el mundo.
En ese orden de ideas encontramos en su frontal unas enormes entradas de aire tanto laterales como centrales, en todas se nota presente la fibra de carbono. Así mismo encontramos los potentes faros led y entradas de aire en el capo. Cabe destacar que solo cuenta con un limpiaparabrisas. A los costados se observan entradas de aire en el lado trasero bajo de las compuertas, espejos en fibra de carbono, en el distintivo o número que identifica al coche. Por detrás observamos el enorme alerón hecho en fibra de carbono, unas impresionantes luces de freno o stop led y el gran difusor dispuesto en la zona baja. A todas estas destaca la doble salida de escape a nivel central, en medio de las luces de freno. Las llantas o rines son de aleación y llaman la atención por su forma tridimensional. Al ser un coche de competencias no es de extrañar que cuete con gran aerodinámica; esta, junto al poco peso le generan grandes prestaciones y mejor control en las curvas.
A nivel interno
Al ingresar a su habitáculo observaremos precisamente un habitáculo de un coche de competencias, en ese sentido, predominan las piezas en fibra de carbono, los asientos están dispuestos por un par de butacas deportivas, un volante de competición tipo monoplaza con botoneras que controlan los diferentes sistemas del coche, y detrás una pantalla digital que mostrará diferentes aspectos de competición. De la misma manera en el centro vemos otra botonera de menos tamaño con diferentes opciones justo al centro del salpicadero. Como es de esperarse este vehículo cuenta con la famosa "jaula" de protección, que no es otra cosa que esos tubos dispuestos en el habitáculo en caso de volcamientos.
Aspectos mecánicos
Los mecánicos de Brabham Automotive confirmaron que este bólido cuenta con un poderoso propulsor de 5.4 litros V8 atmosférico, capaz de generar unos 700 caballos de fuerza, algo aceptable y de seguro competitivo para cualquier equipo dentro del mundo del endurance.
Solo habrá unas 70 unidades y las primeras 35 saldrán con los colores distintivos de los coches históricos de la marca. El costo de cada una será de 1,15 millones de euros.
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