Esta semana que hoy termina será con toda probabilidad la más intensa en cuanto a presentaciones este año, o al menos, en la que más modelos de prestigio se han desvelado. Gracias a las presentaciones en Ginebra de los Bugatti Chiron, Koeniggsegg Regera, Lamborghini Centenario y Huracán Avio, los nuevos Apollo y un larguísimo etcétera de nuevos modelos que se han dado cita en los pabellones del Palexpo de la capital suiza.
Sin embargo, tras el aluvión de cifras desveladas estos días hay una que quizás haya pasado más desapercibida y que es la que más ha llamado nuestras atención. Según el mismo presidente ejecutivo de Bugatti, Wolfgang Dürheimer, el Chiron será el primer modelo de la marca que de beneficios a la empresa, tras el Veyron, un modelo que pasará a la historia por muchos motivos, pero también por ser el modelo menos rentable y más costoso de la historia.Según el patrón de Bugatti, con el Chiron "hicimos nuestra tarea en todas sus dimensiones. Con este modelo durante su vida útil, con 500 unidades y un precio base de 2,4 millones de euros, logrará que hagamos dinero con este proyecto". Toda una revelación tras el inmenso agujero económico que supuso el Veyron desde su desarrollo, probablemente uno de los más caros de toda la historia de la automoción.
Lo que provocó que a pesar del altísimo precio de salida de cada uno de los 450 ejemplares vendidos, la mayoría de ellos entre los 1 y los 3 millones de euros, Bugatti perdiera una cantidad aproximada entre los 3.5 y 5.5 millones de euros por cada una de las 450 unidades comercializadas del modelo. Convirtiendo el proyecto Bugatti en un pozo sin fondo para el Grupo Volkswagen AG.
Proyectos
La información revelada por Dürheimer nos da la pista de porque a pesar de la reciente polémica de las emisiones de algunos de sus motores el grupo ha decidido no suspender el proyecto Bugatti y sin embargo cancelar la segunda generación del Phaeton, que en teoría estaba terminada.
Además, el mismo Dürheimer afirmaba que dichos beneficios quiere mantenerlos en la empresa para futuros proyectos. A la pregunta de que tipo de proyectos reveló que no lograba quitarse de la cabeza la idea de una berlina de cuatro puertas con el emblema de Bugatti. Aunque también podría significar el desarrollo de las futuras y previsibles versiones del Chiron, al estilo de lo que ya vimos con el Veyron, que además de las versiones abiertas y Super Sport, gozó de innumerables ediciones limitadas durante la década que estuvo en venta.
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