Nuestro vehículo es una inversión muy costosa que puede representar mucho tiempo de ahorros, por ello, ese patrimonio es algo que debemos proteger en todo momento no solo a nivel mecánico sino también de manera externa. Mantener nuestro coche limpio tanto en su interior como en su carrocería es una necesidad, si eres de los que no tienen hidrojet no te preocupes, con unas cubetas o una manguera doméstica es suficiente; tampoco estamos en contra a que lo lleves a un autolavado, aunque es cierto que en la actualidad muchos de estos lavados industriales emplean sustancias abrasivas que pudiesen rayar o dañar la pintura de tu auto, por lo que la opción de lavarlo a mano o de manera tradicional permitirá que lo conserves en buenas condiciones. A continuación te damos algunos tips para que lavar tu automóvil sea relajante y satisfactorio tanto para ti como para tu bolsillo.
Usa los implementos necesarios
En primer lugar debes contar con algunas cosas para poder realizar el lavado de tu coche, entre ellas podemos mencionar unas cubetas, por lo menos dos; una esponja, champú para vehículos, manguera, cepillo para lavar las llantas y los rines, entre otras cosas. También debes ponerte un atuendo apropiado para la ocasión que pudiesen ser un short y sandalias de goma o en su defecto si el clima está muy frio un pantalón y botas de goma. Luego de tener estos implementos debes proceder a llenar las cubetas con agua, en una de ellas debes echar el detergente líquido o champú de acuerdo a las recomendaciones del fabricante en cuanto a la proporción entre el detergerte y el agua. La otra cubeta debe contener agua limpia que se usará para enjuagar la carrocería.
Lava el vehículo bajo la sombra
Estacionar el auto en un lugar fuera del alcance del sol evitará que el agua se seque antes de tiempo, además, el excesivo calor que producen los rayos solares secará también los productos de limpieza, lo que no les permitirá actuar o alterará sus propiedades dificultando el proceso de limpieza. Por otro lado, un chorro de agua fría sobre un parabrisas o vidrio que ha estado por mucho tiempo bajo el sol podría estallarlo, lo que incidirá fuertemente en nuestro bolsillo al tener que reemplazarlo. Se recomienda lavar el coche semanalmente, pero si ha llovido es aconsejable lavarlo cuanto antes una vez que haga buen tiempo para así retirar las sustancias químicas y ácidas del agua que han quedado en el pavimento y que por consiguiente es salpicado hacia la carrocería cuando este se desplaza por el mismo.
Comienza desde el techo
Primero, con la ayuda de una manguera rocía todo el exterior del coche y mantenlo húmedo. Una vez humedecido comienza a lavar el auto por secciones comenzando por el techo y vamos bajando hacia los vidrios laterales y parabrisas y de ahí hasta el final de la carrocería y llantas. Esto siempre tiene que efectuarse de esta manera, vale decir de arriba hacia abajo para que el agua sucia vaya cayendo sin manchar las partes bajas del auto. Usa una manopla o esponja suave para limpiar la carrocería y nunca un cepillo pues estos producen rayones sobre la pintura, enjuaga la manopla o esponja frecuentemente en la cubeta con champú para remover la tierra que se pega a ella. Presta atención a los zócalos ya que se llenan de mucha tierra, brea o alquitrán.
Lava bien los rines y los neumáticos
Las ruedas son las partes que más se ensucian en un auto, por ello es muy importante usar el implemento adecuado para lavarlas pues de lo contrario aunque las lavemos con esponjas al secarse notaremos que continúan sucias. De modo que usa un cepillo para lavar el rin y la llanta. Si el mismo cuenta con tasas lo mejor es sacarlas y lavarlas aparte junto con los rines convencionales y las ruedas, de esta manera cuando estemos aplicando el agua para enjuagar no aparecerá ese líquido negro que contiene restos de las pastillas de los frenos que manchan toda la tasa.
Seca el auto completamente
Al finalizar el lavado del coche es importante secarlo, no permitas que el aire o el sol seque la carrocería pues al evaporarse el agua quedarán muchas marcas que tendrás que limpiar nuevamente, tampoco uses una toalla áspera o algún trapo viejo. Es recomendable usar uno de gamuza, toallas de felpa o de microfibra, esas que en muchos sitios se les conoce como cuero de secar. En cuanto a los vidrios, estos se deben secar con un periódico o una servilleta pues el papel los dejará bien lustrados.
Una vez concluido el lavado del vehículo, si quieres puedes encerarlo. De este modo la cera formará una película que protegerá la pintura tanto de los dañinos rayos del sol como también de la acción de la intemperie, además, los compuestos de la cera actúan como repelente ante aquellas sustancias que chocan y se adhieren al auto mientras circula por el pavimento. Se recomienda por lo menos una vez al año aplicar pulitura con la ayuda de una máquina de pulir para mantener la pintura en buen estado y restaurar su brillo, así ahorramos dinero al no tener que enviar nuestro coche al taller para que le hagan unos retoques de pintura. Siguiendo estos sencillos pasos y recomendaciones lograrás que la limpieza exterior de tu auto sea un placer y estarás cuidando una de las inversiones más importantes de tu vida.
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