Para los fanáticos de las carreras de autos deportivos de los años 50, hay pocos vehículos más buscados que el Jaguar C-Type y, entre los C-Type, los más buscados son los autos Ecurie Ecosse.
Ian Stewart y su establo de carreras escocés, Ecurie Ecosse, compitieron con siete chasis C-Type en el período y ahora cada uno tiene un auto hermano gracias a una nueva compañía llamada Ecurie Ecosse. El trabajo en metal de los siete coches hermanos se realizará en Coventry, en el mismo edificio que albergaba las carrocerías de Jaguar en ese momento. El chasis y la carrocería serán construidos a mano por artesanos, dice Ecurie Ecosse, y un motor Jaguar XK de seis cilindros en línea irá debajo del capó. El trabajo de la carrocería, al igual que los C-Type originales, estará hecho de aluminio de calibre delgado montado en un marco espacial y habrá una fidelidad total en la forma.
La mecánica del coche
Sin embargo, Ecurie Ecosse ha realizado algunas mejoras. Sostiene que, dado que el equipo de carreras mejoró sus autos para competir y ganar en Le Mans, se les puede permitir algunas modificaciones propias. Es por ello que, el motor Jaguar XK de seis cilindros en línea también se mantiene, pero la capacidad se ha aumentado a 4.2 litros para generar unos poderosos pero manejables 300 caballos de poder. Sin duda, la mayor potencia también se vio favorecida por la adición de inyección de combustible. El equipo también ha agregado frenos más grandes para manejar la potencia adicional, en este caso, discos y pinzas en las cuatro ruedas.
Parte de su historia
Eso sí, el C-Type ya era una especie de maravilla tecnológica. No solo su bastidor espacial estaba a la vanguardia de la construcción, fue un banco de pruebas para algunos de los primeros frenos de disco Dunlop, y fue el primer auto de carreras diseñado en un túnel de viento. No hay mejor manera de celebrar el éxito histórico de los Ecurie Ecosse C-types que fabricar un lote de automóviles en su honor, de hecho, es lógico seguir el ejemplo de sus antepasados, basándose en todos sus detalles, hechos a mano en Coventry y ajustados por los técnicos de Ecurie Ecosse.
Visto desde afuera
Si le echamos un breve vistazo a su exterior encontraremos un frontal clásico pero deportivo, con sus faros de forma redonda al igual que sus luces de cruce. Hay tonalidades de color blanco tanto en el capó como en la parte alta del frontal; la parrilla se compone de parales dispuestos en forma vertical de color cromo. Los parabrisas son recortados y ovalados.
A los lados del auto las llantas o rines en cromo clásicas, escondiendo discos y pinzas de freno en su interior. Siguen las branquias en la parte trasera del guardafango delantero. Los escapes se encuentran en la parte más baja de las puertas. Detrás del coche la cajuela en caída hacia el suelo, con el círculo de color blanco, las luces de freno o stop de pequeño tamaño al igual que las luces de cruce o intermitentes.
Dentro del coche
En el interior observamos un volante de tres radios de madera fina, los marcadores detrás del timón totalmente en analógico, la palanca de cambios en el centro y el freno de mano. Los asientos vienen en cuero.
La razón de su construcción
Es importante destacar que la producción de estos vehículos se basa en que recientemente se realizó una venta de RM Sotheby's en 2015 en Monterey y un coche similar se vendió por la cantidad de 13 millones de dólares, algo que a la larga termina siendo un gran negocio para los fabricantes.
Detalles finales
Para culminar, en Ecurie Ecosse han completado el primer automóvil. El tiempo que tardará el resto es desconocido, al igual que el precio, sin embargo, nos imaginamos que no se deben tardar mucho tiempo ya que de seguro habrá interesados en adquirir estos coches desde cualquier parte del mundo.
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