Los coches clásicos siguen marcando una tendencia importante y se mantienen más vigentes que nunca. Es impresionante que el valor de un vehículo clásico supere con creces lo que cuesta un modelo nuevo, de última generación, y con todo el despliegue tecnológico que caracteriza a los grandes fabricantes; basta con asistir a una de las subastas que se realizan en el año, pero sobre todo a las que planean las casas más importantes, las que verdaderamente son especialistas en subastas de coches clásicos.
Y es que en el mundo hay para todos los gustos, desde los coches clásicos, ejecutivos y deportivos que pertenecen a las marcas más famosas del mundo, hasta los modelos más extraños, los que fueron encargados especialmente según el gusto de una persona; estos últimos generalmente son los que cuestan más dinero, porque precisamente se trata de coches únicos, que no tienen comparación con cualquier otro, y que se consideran unas verdaderas joyas de la historia automotriz. El precio que están dispuestos a pagar los coleccionistas por estos ejemplares no tiene límites, inclusive se han superado marcas muy por encima del millón de euros. A muchos de nosotros nos parecerá absurdo cancelar tanto dinero por un coche, sin embargo, cuando de lujos se trata cualquier cosa es posible.Mercedes-Benz se negó
Ese es el caso del vehículo del cual hablaremos a continuación, una rareza hecha prácticamente de manera artesanal, a pedido de una persona con grandes posibilidades económicas. La historia de este vehículo es muy interesante porque en principio su dueño le pidió a la marca Mercedes-Benz que le ayudara, diseñando algo especial, pero al parecer los alemanes se negaron sin importar cuánto dinero había de por medio. El dueño de este coche inicialmente quería una pickup montada sobre un chasis de la marca de la estrella, pero probablemente los germánicos no quisieron modificar la imagen de sus coches por lo que decidieron negarse ante tal petición.
Bentley aceptó
El siguiente paso fue tocar otras puertas, hasta que finalmente se consiguió lo que se esperaba, un auto hecho a la medida montado sobre un chasis Bentley S2, y las modificaciones estuvieron a cargo del reconocido carrocero Wendler. Es asi como nació el único Bentley S2 by Wendler, un verdadero automóvil con características muy especiales del que solo hay uno en el mercado. Esto lo convierte en una edición muy especial, y desde luego, en un vehículo muy cotizado por los coleccionistas del mundo.
Aspectos estéticos del coche
En su exterior se aprecia un color gris, combinado de manera perfecta con el cromo que se aprecia en la parrilla con barrotes verticales, sus faros envueltos en una carcasa en color plomo, dos entradas de aire a los lados de la parrilla con barras horizontales cromadas y el paragolpes metálico, todo cromado, deslumbrando gran elegancia.
A los costados los neumáticos con franja blanca y tapas de lujo en cromo, cerradura de las puertas en cromo, lo mismo para sus espejos. En la parte baja de las puertas unas platinas elegantes, y el cromo que bordea todos los vidrios del coche y las puertas. Finalizamos por la parte trasera, donde se aprecian sus luces de freno o stop también rodeadas de cromo, paragolpes cromado, el logo de Bentley en el centro del portón trasero y en el centro del paragolpes, y en la propia cerradura.
Dentro del coche
Si pasamos a su habitáculo apreciamos parte del salpicadero en cuero de color negro y madera, sobre todo en el lugar que acoge los relojes indicadores de velocidad, temperatura, combustible, entre otras cosas. El volante es grande y de tres radios. El radio am se encuentra instalado en la parte más baja del salpicadero. La tapicería de los asientos y las puertas es en cuero de color rojo. El maletero del coche está forrado en madera fina, y guarda en neumático de repuesto en un compartimiento especial.
Aunque no se dispone de información acerca de la mecánica del vehículo se sabe que su precio rodea los 495.000 euros, algo que simplemente supera cualquier expectativa.
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