Cuando nos sentamos detrás del volante de nuestro vehículo, la seguridad al arrancar deben ser nuestra mayor preocupación ya que la mayoría de los accidentes automovilísticos se deben a que sus conductores, o no prestaron atención a las señales de tránsito, o sencillamente se distrajeron ya sea por voltear la mirada hacia un objeto fijo en el ambiente o por observar su teléfono para atender una llamada entrante o leer algún mensaje de texto recibido. Es por ello que es crucial conocer los aspectos básicos y ponerlos en práctica tanto en la ciudad como al salir de ella en carretera.
Cinturón de seguridad
Esto es lo primero que tenemos que abrocharnos al encender nuestro coche, lamentablemente a muchos se les olvida y arrancan si él o se lo colocan rápidamente al ver de lejos a un oficial de tránsito para que al pasar por el frente de él no los mande a detenerse para aplicarles una multa, pues en la Ley de Tránsito su uso es obligatorio y al no hacerlo corre el riesgo de recibir una boleta con las unidades correspondientes. Es interesante que chocar a una velocidad de 130 km/h equivale a caerse desde un edificio a una altura de 67 metros, por lo que el cinturón de seguridad puede salvarnos la vida en un accidente automovilístico.
Presta la mayor atención en frente de ti
Cuando conducimos en áreas residenciales o con mucho tráfico es importante mantener la mayor atención, de este modo podemos anticiparnos a los coches que estén delante de nosotros al momento que ellos frenen o sencillamente cuando una persona, perro o alguna otra mascota trate de cruzar la calle. Es imperioso estar consciente de lo que pudiese suceder en los próximos 15 segundos para poder responder de forma segura ante cualquier evento que esté por ocurrir. Esto es muy importante cuando circulamos en autopistas ya que la velocidad allí es elevada, de manera que debemos estar al pendiente ante la posible incorporación repentina de otros vehículos o el frenazo de ellos, además hay que adecuar la velocidad del auto a lo que podamos ver y desconfiar de aquellas curvas con poca o nula visibilidad.
Evita distraerte con tu teléfono celular
Este punto es muy importante pues es una de las mayores causas de accidentes en la actualidad. Hoy en día casi toda persona posee un teléfono celular que nos mantiene siempre comunicado con nuestros más allegados y siendo los mensajes de texto junto con las aplicaciones de las redes sociales tan populares y que distraen al conductor se ha tenido que prohibir su uso mientras se conduce. Según los estudios de varios expertos, marcar un número en nuestro móvil mientras circulamos a unos 60 km/h implica recorrer una cuadra a ciegas. Por ello, si tienes que atender una llamada o enviar un mensaje de texto hazte a un lado y oríllate para manipular tu móvil con seguridad. Los coches actuales disponen de conexión Bluetooth como opción de manos libres y muchos la incorporan en su volante multifuncional, así que aprovecha esta prestación en tu automóvil y úsala, de este modo no tendrás que detenerte.
No adelantes si no estás seguro y disminuye la velocidad en pavimento mojado
No rebases los autos que están delante de ti a menos que sea necesario, esto aplica sobre todo en aquellas carreteras de doble vía. Recuerda el dicho: "Es mejor llegar tarde que no llegar". Nunca adelantes en las curvas pues no sabes que podrás encontrarte más adelante. Hay que tener claro que la maniobra de adelantamiento es una de las que más riesgo conlleva y si es necesario hacerla cerciórate circular por el canal contrario con un mínimo de 100 metros del coche contrario. Usa las luces direccionales o de cruce para que el conductor que está detrás de ti sepa lo que estás haciendo.
Si nos agarra el mal tiempo ya sea este de lluvia, niebla o nieve recuerda que el pavimento se tornará resbaladizo, por ello, disminuye la velocidad. En un día lluvioso, detener un coche por completo a una velocidad de 100 km/h equivale a recorrer una distancia similar a una cancha de futbol. Si al aplicar los frenos nuestro auto patina o la dirección no gira mantén la calma y sujeta firmemente el volante y no sigas pisando el freno, ayúdate con las velocidades de tu auto y recorta hasta recuperar el control del mismo.
Conduce relajado y no pierdas la calma con otros conductores
Al estar relajado se conduce de forma segura y tranquila. Conducir cansado o con sueño produce el efecto contrario, además, causa problemas físicos, mentales y expone al conductor a quedarse dormido tras el volante. Otra forma de mantenerse en calma es dejar que aquellos conductores agresivos y groseros se adelanten. Alterarnos a causa de ellos o responderles solo tendrá un impacto negativo y nos estaría exponiendo a provocar un accidente.
Neumáticos
Es importante observar la profundidad de los tacos o líneas de los neumáticos para estar al tanto en el momento que requieren su reemplazo. Pero mientras estén en su periodo de vida útil es necesario mantenerlos en buen estado, por ello, hay que revisar constantemente su presión ya que al existir disparidades entre ellos impedirá que el auto frene de manera eficiente, sobre todo, si se nos presenta una frenada de emergencia. Otra cosa a la que también debemos prestar atención es a los cepillos limpia parabrisas, las luces y el estado de los frenos, sobre todo si vamos a salir de viaje fuera de la ciudad. Recuerde nunca marcharse sin revisar antes el neumático de repuesto, también lleve consigo algunas herramientas, el gato y el triángulo de seguridad. Manténgase siempre alerta, cuide de los suyos y siga estos consejos, de esta manera evitará correr riesgos innecesarios.
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