El cinturón es el artilugio de seguridad más importante, que ha salvado millones de vidas desde que se implantó por primera vez en los vehículos. Sin embargo, tuvo inicios difíciles, pues fue rotundamente rechazado en sus primeros años y no convenció a la mayoría. Hoy vamos a repasar los inicios de esta herramienta y su evolución hasta la actualidad.
Sus inicios datan desde el lejano 1885, y no precisamente en automóviles, pues su uso era para evitar que los pasajeros en coches de caballos se cayeran debido a los caminos bacheados. Fue en 1911 cuando Benjamin Fouls adaptó el cinturón se adaptó a los aviones, en este caso fue en uno de los aviones obra de los hermanos Wright, y tuvo el objetivo de evitar que los pasajeros cayeran producto de los vaivenes del viento. No fue sino en los años 40 y 50 que la utilización de este artilugio podía empezar a ver la luz, ya que la venta de automóviles crecía considerablemente. Los médicos empezaban a hacer hincapié en la necesidad de implantación de un sistema claro de seguridad en los coches, pero esto era categóricamente rechazado por las fábricas y los consumidores, quienes argumentaban que un vehículo seguro no necesitaba ningún sistema de protección.
Preston Tucker
Siempre existirá en todo ámbito un pionero de la seguridad, y en este caso, apareció en 1948 Preston Tucker, un empresario y diseñador de automóviles. Tucker presentó el cinturón como una herramienta para evitar las muertes que ocurrían en accidentes viales, las cuales pensaba que se debían en mayor parte a la falta de este elemento. El mismo fue presentado en el único modelo que fabricó Preston Tucker, el llamado Tucker Torpedo. A pesar de la fe y la intención de Tucker, el proyecto se vio perjudicado por las dificultades que provocaron los organismos que regulaban a la industria del automóvil en Norteamérica.
Llegó 1956 y la idea de Preston Tucker volvía a ser protagonista, esta vez por obra de Robert McNamara, quien era director de Ford Motor Company. Este último decidió implantar el cinturón de seguridad en uno de sus vehículos, pero la propuesta no terminaba de agradar a casi nadie, por lo que lo ofrecieron dentro de un paquete de seguridad opcional.
Y llegó el sueco Nils Bohlin
Entró en escena el sueco Nils Bohlin, quien trabajaba para Volvo y desarrolló en 1959 el cinturón de tres puntos de apoyo, el que conocemos el día de hoy.
La carrera de Nils Bohlin data desde 1940 empezando el mundo de la aviación, donde consiguió que se le atribuya la patente del asiento eyector propulsado por cohetes en los aviones de combate. En este caso, la necesidad de equipar el cinturón de seguridad era clara, y debía tener al menos cuatro puntos de apoyo. El sueco se convirtió en un experto de la seguridad aeronáutica, y por sus éxitos fue contratado por Volvo en 1950. Cuando empezaba su ciclo en Volvo, el director de la compañía en aquel momento había sufrido la pérdida de un familiar cercano en un accidente vial llevando un cinturón de dos anclajes, lo que fue motivo para que Bohlin se pusiera en marcha para trabajar en el diseño de tres puntos.
Nils Bohlin realizó una encuesta en la que analizó unos 28.000 accidentes, y concluyó que en la totalidad de los casos los pasajeros sin cinturón sufrían daños considerables, y en el peor de los casos la muerte incluso a velocidades inferiores a los 100 kilómetros por hora. Ya en 1959, los modelos Amazon y PV544 equiparon de serie el cinturón de seguridad de tres anclajes, y con el paso del tiempo todos los vehículos de Volvo contaban con el cinturón de tres puntos.
Después de ciertos intentos en el pasado, se concluye finalmente que Nils Bohlin se llevó el éxito que desde hacía años se buscaba con el proyecto del cinturón y otros no habían podido conseguir a pesar de la persistencia.
Años posteriores y actualidad
La necesidad y el uso del cinturón crecieron categóricamente, finalmente llegó el éxito del artilugio de seguridad. Tal fue el caso, que Volvo entró en razón y consideró su uso favorable a la humanidad, por lo que liberó la patente para que todos los fabricantes implantasen su uso. En la actualidad, los cinturones de seguridad siguen evolucionando, al punto de que se están montando airbags en los cinturones y los mismos se tensan en caso de frenada o accidente.
Sin duda la invención más importante y con el efecto deseado es el cinturón de seguridad, al cual se le debe muchísimo por evitar daños lamentables la mayor cantidad de ocasiones, y salvar una gran cantidad de vidas después de accidentes. Conociendo ahora toda la historia, no deja de sorprender la diferencia de conceptos de aquellos días comparados a lo que tenemos en la actualidad, donde la seguridad es primordial y absolutamente indiscutible.
Como suele pasar en la vida, todo tiene unos inicios que probablemente no podíamos imaginar que fueron así, en este caso, de seguro no pensamos que existió aquel rechazo hacia la medida de seguridad que hoy en día tenemos como la más importante. Seguramente existen más casos, sobre todo en el mundo del automóvil, de que algunas invenciones no hayan tenido la mayor aceptación en sus comienzos, y que hoy sean tan primordiales como es el caso del cinturón.
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