El gigante automotriz Mazda presentó en los en Estados Unidos el nuevo SUV que llegó a relevar al Mazda modelo CX-3. En esta oportunidad, el fabricante de automóviles japoneses nos sorprendió con un modelo único, algo completamente nuevo pero que sigue manteniendo algunos rasgos de sus antiguos predecesores. Se trata de la nueva Mazda CX-5, el arma con la que cuentan los nipones para tratar de posicionarse de manera efectiva en el mercado automotriz a nivel mundial. El uso de tecnología de punta, sumado al resultado de muchas investigaciones les da razones a los creadores que laboran en Mazda para creer que esta maravilla automovilística los llevará por el camino del éxito.
Pintura única
Resulta que este nuevo vehículo ofrece una cara totalmente deportiva, saliéndose de lo tradicional y sobre todo lo clásico. Para empezar, hay que resaltar la pintura Soul Red Crystal fabricada con los mejores detalles y un color fuera de todo contexto; esta pintura le da más fuerza al aspecto único con el que cuenta la CX-5, y reafirma su imagen frente a otros vehículos de similares características. El interior de la nueva CX-5 es totalmente renovado y pensando principalmente en el infoentretenimiento de sus ocupantes; los acabados son de primera y hechos con materiales de altísima calidad, es espaciosa y sobre todo muy cómoda tanto para el conductor como para sus acompañantes.
Máximo confort
En el tablero de esta nueva invención tecnológica, encontramos una pantalla con el sistema multimedia que hará el papel principal de entretenimiento para todos sus ocupantes. Entre los detalles más resaltantes de esta nueva Mazda observamos la ausencia de botones, convirtiéndose de alguna manera en una versión algo simplista. En este proyecto, los japoneses aseguraron que dieron un gran paso en lo que a confort respecta ya que expresaron que trabajaron en muchos aspectos para reducir al máximo las vibraciones, los ruidos exteriores y cualquier elemento externo que pueda llegar a sus ocupantes y causarles alguna molestia, y para ello utilizaron el Noise Vibration and Harshness, algo que será definitivo a la hora de decidirse a comprar por parte de todos los interesados y seguidores de la prestigiosa marca.
Con respecto a sus motores, Mazda aseguró que habrá variedad dependiendo del gusto de cada quien. Para empezar, la CX-5 será comercializada con una gama de propulsores diésel y gasolina, los cuales contarán con la tecnología Skyactiv de última generación; en el caso de los motores a gasolina, estos llegarán en versiones de 2.0 litros y 2.2 litros, y en el caso de las versiones a diésel, estas contarán con motores de 2.5 litros. Las transmisiones para estos modelos serán sincrónica, con seis velocidades y también la versión automática por convertidor de par, con seis velocidades. Como de costumbre, los japoneses apostarán fuerte a estos modelos y la eficiencia y el desempeño de ellos serán su principal publicidad para alcanzar la mayor cantidad de ventas posibles tanto en América como en Europa. Se espera que para febrero del próximo año la Mazda CX-5 se comience a vender primeramente en Japón para luego trasladarse a Europa y parte de Latino América.
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