Estúpido: rellena una solicitud de empleo y acto seguido roba un coche

Hay ocasiones en las que o bien a algunos les gusta dárselas de listos o bien no se piensan dos veces las cosas, ya que muchas veces las consecuencias de los actos no debidamente estudiados suelen ser generalmente negativas. Este es el caso de Courtney Cordell Wheat, un ciudadano del Estado de Tejas, Estados Unidos, que ahora se enfrenta a una acusación de uso no autorizado de automóvil, lo que viene a ser el robo de vehículos de toda la vida.

El individuo en cuestión se llevó un vehículo del estacionamiento de un local de comida rápida mejicana de su ciudad, acto que vieron tanto el propio dueño del vehículo como el encargado del establecimiento, que corrieron tras el sin lograr detenerlo. El problema es que el mismo Wheat acababa de rellenar tan solo unos minutos antes una solicitud de empleo en dicho restaurante, por lo que se iba con el coche robado dejando todos sus datos de contacto en el mismo restaurante. Simplemente, una torpeza mítica.

Por supuesto, poco tiempo después la policía lo localizaba, de hecho, no debió costarles demasiado esfuerzo, habida cuenta que el propio ladrón se había encargado de dejarles todos sus datos de contacto.

No se sabe si tenía intención o no de robar el coche inicialmente, aunque queda claro que si dejó sus datos para el trabajo al menos sí que tenía intención de solicitar el empleo. Lo cierto es que justo cuando salió del restaurante se tropezó con la oportunidad de robar el coche y no lo dudó un segundo. Wheat se encuentra actualmente en la penitenciaría local a la espera de juicio, en el que más que probablemente se reirán a su costa, sobre todo en las redes sociales.

Estupidez congénita

Desconocemos si este es el robo de vehículo más estúpido conocido, aunque está claro que debería estar al menos en el top 10, al menos. Al contrario que otro tipo de robos, que pasado el tiempo no ha habido manera de esclarecer, como ya vimos hace unos días con los modelos desaparecidos más célebres de todos los tiempos. Auténticas piezas de coleccionista que fueron robadas y jamás se ha vuelto a saber de ellas.