Y es que hoy, la marca situada en la ciudad italiana de Maranello, ha enseñado la primera imagen que antecede a la presentación del próximo California, una composición simple, tanto como su significado.
Con el rojo Scuderia de fondo, el nombre F149M responde a la transcripción de "Ferrari 149 Modificato" donde 149 corresponde al código interno del California y, en una traducción más que obvia, M de modificado, o lo que entenderíamos como actualizado, el cual será presentado el día 12 de febrero.
Nuevos tiempos
Pero, además de que se espera un nuevo aspecto, más próximo al FF o al F12 que al propio California, que abrió la actual familia de diseño hace ya más de cinco años, será en su motor y, sobre todo, en su concepto, donde más se verá afectado el menor de los Ferrari.
Y es que la vuelta al turbo no es solo cuestión de la Formula 1, puesto que sus rivales más directos, llevan años adoptando un bloque no demasiado voluminoso junto con uno o dos turbos, donde el clásico Porsche 911 Turbo lleva una gran tradición y es en McLaren con su motor M838T donde directamente viene a ser reflejado esta nueva generación de deportivos.
El nuevo motor que dará vida al California seguirá siendo un bloque con 8 cilindros en V pero con un cubicaje drásticamente inferior, del 4.3 litros atmosférico, se acoplará el de 3.8 y dos turbos que ya estrenó "su primo", el Maserati Ghibli. Al tener el mismo corazón, se espera que este deportivo sea capaz de producir más de 550 CV, es decir, alrededor de un 10 % más de lo que el original desarrollaba (489), pero, por otro lado y aunque esto en el mundo de los deportivos hasta hace años importara menos que poco, con una considerable mejora en los consumos de carburante, aún por concretar.
¿Ferrari de acceso?
Puede que el California sea actualmente el Ferrari menos deseado (o no, si pensamos en el desafortunado aspecto y elevado precio del FF) entre los seguidores y soñadores de la marca, pero no es así entre los clientes habituales de la marca quienes han incluido de buen agrado en sus garajes a este vehículo, independientemente de que más de uno disfrute de modelos pasados o actuales incluso de mayores prestaciones y precio.
Esto ha supuesto una depreciación del California y, sobre todo, en el mercado de segunda mano, dado que resulta no ser ni tan atractivo ni tan exclusivo como su hermano inmediatamente mayor, el 458, todo un purasangre, o la joya de la corona (de los mortales) el F12berlinetta (ignorando por el número de piezas a producirse del LaFerrari, tan solo 500, lo cual supone un mercado reducido a una clientela elegida personalmente por Montezemolo, y por el desorbitado precio de cada una de ellas) y por eso Ferrari reducirá el reducirá el ritmo de ensamblaje de la cadena de montaje del nuevo California a algo más de un vehículo y medio al día, es decir, no más de 500 unidades al año.
Quienes se acerquen al mostrador de Ferrari ya podrán reservar in situ uno de estos nuevos California, no sin antes ser avisado de su precio, que se entiende que será próximo a los actuales 210.000 euros que cuesta el cavallino.
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