Italia nos ha regalado muchas alegrías en cuanto al mundo automotriz, sobre todo en lo que respecta a lo deportivo, ya que marcas como Lamborghini, Ferrari y Alfa Romeo son unas de las muchas que desde sus inicios ha estado gobernando las carreteras, sin embargo en lo deportivo no queda todo, ya que en Italia se han encargado de atender cada área de la sociedad, y para eso la Fiat ha hecho un excelente trabajo desde su fundación el 11 de julio de 1899, sobre todo con la creación del modelo 508 Balilla el cual se mantuvo vivo durante escasos 5 años, y digo escasos porque normalmente los buenos autos duran muchas generaciones. Hablemos de este estupendo clásico italiano.
Su concepto
El Fiat 508 Balilla es un automóvil que obviamente fue construido por el fabricante italiano Fiat en la década de 1930, el cual ayudo a que la clase media del país pudiera tener un auto en su haber, porque en aquellos primeros pasos de los autos en el mundo no todos podían tener uno, sino solo las clases pudientes debido al elevado precio. Es importante mencionar que este modelo fue fabricado para reemplazar el Fiat 509.
El nombre del modelo Balilla
El apodo o nombre de este modelo fue en honor a un niño genovés el cual en el año 1746 lanzo una piedra a un soldado austriaco en protesta por la ocupación militar austriaca, el valiente niño llamado Giovanni Battista Perasso los italianos de aquel momento le apodaron Balilla como diminutivo de bala, en vista de que la piedra lanzada fue diminuta por ser la mano del niño muy pequeña, y esta acción desencadeno una verdadera revuelta contra los austriacos, de tal manera que a la balilla lo celebraron como un héroe local.
Breve historia
Este proyecto se lo debemos a varios personajes muy importantes de la industria automotriz de aquella época, personas como los ingenieros Nebbia, Fessia, Zerbi y el maestro de la escuela de diseño automotriz italiano Dante Giacosa, lo que significa que este modelo para su época era toda una novedad pero a un precio más acercado a la ciudadanía italiana de aquella época. Cuando el mundo lo vio por primera vez fue el 12 de abril de 1932, en la feria de Milán en el Salón del Automóvil, y muchos de las clases medias podían adquirirlo gracias a la producción en masa por lo que su valor no era tan alto como sus contrincantes de otras marcas, de tal manera que no solo se vendió con éxito en Italia sino también en España, Polonia, Alemania y Francia.
Las series y sus variantes
Entre el 1932 y el 1937 este estupendo auto se fabricó en dos series, uno de ellos ofrecía un cuerpo tradicional alineado con el Fiat 509 el cual reemplazo y este tenía una caja manual de tres velocidades, luego la otra serie era presentado con un cuerpo mucho más aerodinámico y con una caja manual de cuatro velocidades. Ahora bien, todo no queda allí, porque estas series ofrecían sus modelos en varias versiones, es decir, en sedan, araña, torpedo, ejercito colonial, berlinette Mille Miglia y araña deportiva e incluso una van comercial.
Hablemos de su tren motriz
Este coche de 3.14 metros de largo, 1.40 de ancho y 1.53 de alto con un peso de 710 kilogramos ofrecía dos motores a gasolina de cuatro cilindros de válvula lateral de 995 cc, y de carburador individual. Estos motores ofrecían entre 20-24 caballos de fuerza y 30-36 caballos de fuerza, es decir, todo un logro para aquella época donde aún no conocían lo que era sobre pasar los 100 kilómetros por hora de una manera rápida y concisa.
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