Son muchas las marcas que han comprendido que es lo que se necesita para estar en un primer plano y contentar a todos los usuarios, especialmente a esos clientes más tradicionales y fieles a la firma. Este es el caso de Ford, que ahora ha movido ficha y después del éxito que han visto en el relanzamiento del Ford Puma en formato SUV, han comenzado a trabajar en la manera de recuperar la esencia de su pasado. Ahora han movido ficha y han asegurado que es bastante probable que veamos en breve de nuevo al Ford Fiesta, aunque lo hará con un cambio notorio en todos los aspectos.
El icónico modelo podría tener los meses contados para volver a la luz. Eso sería a partir del 2026 y lo haría entrando en un terreno donde ocuparía parte del catálogo de modelos eléctricos más asequibles de la firma. Ahora, ha sido Autocar quien ha apuntado que el Fiesta podría volver como una versión de acceso. El mismo CEO de Ford Europa, Martin Sander, ha apuntado que hay un hueco en un futuro no muy lejano para esos modelos eléctricos que no son un SUV, donde entraría el histórico coche.El directivo ha asegurado que desde el grupo están trabajando para crear un nuevo modelo económico y eléctrico que supondrá un punto de inflexión: "Hay valores que nos han hecho exitosos en los últimos años, como la sólida calidad y la relación calidad-precio. No vamos a alejarnos de eso. Estos son valores fundamentales que Ford ha tenido a nivel mundial durante muchos años. A estos se unirán una calidad diferente en términos de diseño, interior, rendimiento y equipamiento".
La puerta está abierta
En la marca no se lo han pensado dos veces para asegurar que han estado estudiando la manera de recuperar esos modelos "icónicos y emocionales", por lo que han dejado la puerta abierta ante el posible regreso del Fiesta o Focus. En ese sentido, se ha podido conocer que ya están trabajando en un futuro eléctrico donde están centrándose en un entorno cada vez más competitivo en todos los sentidos y en el mercado eléctrico.
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