La subasta celebrada el pasado viernes en Lodi, Nueva Jersey, obtuvo el gran resultado que se esperaba, dada la singularidad y el magnífico estado de conservación de los modelos reunidos por el ahora célebre Nicoll.
La puja estrella la obtuvo el más singular de todos, el magnífico ejemplar de Plymouth Superbird de 1970, que con menos de 70.000 millas en su cuentakilómetros era toda una oportunidad para coleccionistas de hierros americanos, de ahí los 575.000 dólares que pagaron por el.
Altas cifras
Otros grandes modelos vendidos con altas sumas fueron los Ford Mustang presentes, un Boss 429, también de 1970, que logró una cifra de 265.000 dólares, y los 170.000 pujados por un Shelby GT 500 de 1967. Curiosa también la puja ofrecida por un Plymouth Hemi 'Cuda a medio restaurar, que aún así llegó a los 347.500 dólares.
Reseñable también el resultado de las versiones Yenko disponibles en la colección. Se pagaron 237.500 dólares por un Yenko Chevelle de 1969 y 315.000 por el Yenko Camaro de 1969 ofertado, aunque el más llamativo fue el Yenko Nova del 69, uno de los siete ejemplares que se cree se conservan de los únicos 37 que fueron construidos originalmente, y por el que se llegaron a pagar nada menos que 400.000 dólares.
En total, más de dos millones y medio se recaudaron en A.J. Willner Auctions con la venta de esta parte de la colección del detenido, que se suman a los otros cincuenta millones incautados por las autoridades estadounidenses.
Fuente: A.J. Willner
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