No hay nada que detenga a la agencia tributaria española y es que están al acecho de las irregularidades desde hace mucho tiempo. En un momento donde muchos usuarios están intentando evitarse ese temido impuesto al valor añadido que tanto nos persigue, no hay que temerle a nada de lo que suceda. Ahora, con una operación conjunta a la caza del fraude fiscal y en una operación inaudita intracomunitaria en Valencia se ha desarticulado una red que no dejaba indiferente a nadie. Con más de 75 modelos de media y alta gama del sector incautados, se estima que estos modelos contaban con una valoración en el mercado de más de siete millones de euros.
La operación ha sido dirigida y coordinada por la fiscalía europea y le han denominado Cavallino. Todo ello comenzó en 2021 cuando la Oficina Nacional de Investigación de Fraude (ONIF) y la Dependencia Regional de Inspección de la Agencia Tributaria en Valencia observaron algunas irregularidades que hacían saltar todas las alarmas. Esta red empleaba sociedades instrumentales, conocidas como truchas, para introducir estos modelos en la península, siendo administradas por testaferros y haciendo operaciones falsas y comprando los coches en Alemania con la intención de defraudar el IVA.Después de una exhaustiva investigación, con la mirada puesta a poner punto y final a la trama, se comenzó a desarticular la trama entre noviembre y diciembre. Con unos 23 detenidos de nacionalidad española y rumana, todos ellos residentes en valencia y alrededores. Desde la Agencia Tributaria, se le ha atribuido un delito contra la Hacienda Pública, blanqueo de capitales y pertenencia a una organización criminal. A todo ello, también se les requisaron 44 cuentas bancarias y 17 propiedades.
Una red millonaria
Inicialmente los coches lograban un valor de unos siete millones de euros, aunque se ha observado que el valor llegaba a los 14 millones una vez valorados todos los bienes que fueron intervenidos. Entre los vehículos intervenidos se observa un Mclaren 720s, Audi RS 3 Sedán, Ford Focus ST, Cupra Fomentor VZ5 y un Porsche Boxster entre muchos otros modelos que todavía se desconoce porque permanecen en secreto de sumario hasta finalizar la instrucción.
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