Este concept car de nombre Brivido de Italdesign Giugiaro se presenta bajo una espectacular apariencia y un prometedor rendimiento. Si bien este vehículo se presenta como un híbrido, solo se conocen algunos datos sobre el de motor de gasolina siendo éste un 3 litros cuyo potencial le permitiría desarrollar 360 CV dirigidos a una caja de cambio de ocho velocidades capaz de catapultarlo en el 0-100 en un tiempo de 5,8 segundos y llegar a marcar los 275 km/h en el velocímetro.
Realmente lo destacable del protipo que nos ocupa no es la motorización puesto que lo que es más que claro es que es toda una declaración de identidad estética enfocada al futuro.
Cuando lo que importa es lo de fuera
El estudio de diseño ha puesto todo su potencial y nos muestra un modelo espectacular. La carrocería, realizada en materiales ligeros ya habituales en este segmento como el aluminio, fibra de carbono y cristal nos la muestran pintada en un rojo significativamente agresivo llamado ?Xirallic pearl?.
Las signitividad del concepto aparece en los laterales, concretamente en las grandes puertas de apertura tipo ?alas de gaviota? donde los cristales de las ventanillas adquieren especial protagonismo al quedar visibles parcialmente debido a que y las la carrocería permite ver a través de ellas el interior. Igualmente, lo que entenderíamos como ventanilla lateral posterior en un cupé, viene siendo el cristal incluido de la puerta de acceso al vehículo.
En el frontal destaca la enorme rejilla inferior que ocupa la anchura del paragolpes y que viene acompañada por dos faros de tipo LED, bastante similares a la zona superior de los del Ferrari 458 Italia, que vienen a agudizar la expresión futurista del la parte delantera y la incisión central en forma de V que da un toque bastante agresivo.
La trasera puede que cause menos impacto. Dos grandes salidas de escapes se adueñan de la atención aunque, también es cierto que son los pilotos en rojo los que, con dos trazadas por lado confluyen en el distintivo de la marca y las letras del propio carrocero: Giugiaro.
Cuatro plazas de lujo
Un elegante, espacioso y lujoso interior, diseñado para recibir hasta cuatro ocupantes donde un arsenal de elementos electrónicos o gadgets se adueñan de la atención gracias al despliegue de luces que estimulan la retina. El puesto de conducción aparece dominado por un volante octogonal poco ortodoxo custodiado por dos pequeñas pantallas que hacen las veces de retrovisores laterales.
Sin duda un coche futurista, creado a partir de los conocimientos de hoy para el mañana y que puede que sea la base de alguno de los superdeportivos con los que soñemos o simplemente un prototipo más que enseñar en un museo y que dentro de años revisemos para reflexionar sobre cómo pensábamos que serían los automóviles del futuro en 2012.
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