Desarrollado en 1970 sobre la base del vigesimoséptimo y último chasis construido del Ferrari 512 S, número 1046, estaba dotado de un V12 de 5.0 litros que desarrollaba 550 caballos, lo que le permitía alcanzar una velocidad superior a los 330 kilómetros por hora.
El lapiz de Paolo Martin, diseñador de Pininfarina, dibujó la extrema línea de este concept, que más de cuarenta años después continúa levantando admiración y perplejidad, dada la radicalidad de su concepto estético.
La apertura de su habitáculo, de tipo carlinga, y sobre todo su radical altura de tan solo 935 milímetros supuso el summum de la corriente de diseño tipo cuña que imperó en los show cars de esa década.
Colección Glickenhaus
El modelo, que permanecía almacenado en las dependencias de Pininfarina, será convenientemente puesto al día y homologado para circular, ya que su nuevo propietario se precia de poder conducir todos y cada uno de los modelos que componen su increíble colección.
Colección de auténticos mitos, ya que el Modulo descansará junto a otros grandes modelos de la marca, como el Dino 206 Competizione, otro espectacular concept ahora en propiedad de Glickenhaus.
Fuente: Road and Track
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