Desde hace algunas pocas semanas se ha mencionado que ya se encuentra muy cerca la fecha de la realización del evento llevado a cabo por la casa de subastas RM Sotheby's, evento del que ya se conoce traerá consigo más de una sorpresa. Sin lugar a dudas debemos acotar que los más interesados en que llegue este día son precisamente los reconocidos coleccionistas, y muy especialmente las personas dedicadas a comprar coches clásicos. Pues bien, les tenemos muy buenas noticias para este selecto grupo de personas ya que allí encontrarán, ya que algunas de las piezas con gran importancia histórica en el mundo del automovilismo se darán cita, como por ejemplo, el caso de un Lola T153 que participó en la Formula Indi 500. Las grandes subastas y eventos donde se exhiben coches generalmente sirven para demostrar a todos los asistentes esos modelos bien llamados de "ensueño", aquellos que gozaron de gran popularidad cuando salieron al mercado, y que de alguna manera marcaron una época que quedó imborrable en el tiempo.
El Ford GT 40 del año 1966
Pues bien, en esta oportunidad les hablaremos de un clásico que muy pronto saldrá a la venta, un Ford GT 40 del año 1966 con historial en el mundo de la competición; pero antes de contar brevemente los pormenores de esta reliquia queremos informar que el evento o la subasta será llevado a cabo el próximo mes de agosto de este año, específicamente los días 24 y 25, en Monterrey California. Al parecer este coche ya cuenta con unas expectativas muy altas, de hecho se cree que, entre los coches clásicos de competencia de resistencia, este modelo pudiera alcanzar fácilmente la suma de los 10 millones de euros.
Porqué se construyó
Como se mencionó anteriormente, para poder entender mejor este coche es necesario conocer un poco la historia del modelo, ya que solo así sabremos por qué se pretende alcanzar una cifra tan elevada por la venta de este modelo. El Ford GT40 fue el coche de carreras construido por Ford Motor Company con el objetivo de destronar nada más y nada menos que a Ferrari, quienes habían liderado a su antojo todos los podios en las competiciones de las 24 horas de Le Mans. Esta especie de "dictadura" del equipo rojo se llevó a cabo desde el año 1960 hasta 1965, obteniendo 6 victorias consecutivas, hasta el momento de la aparición del GT40 en el año 1966.
Sus siglas GT y su poderoso motor
El coche en cuestión recibió el nombre de "GT", haciendo mención a Gran Turismo, y el número 40 hace una pequeña ovación que les recuerda a los organizadores de la competencia las reglas en las cuales se rigen. Otro detalle interesante es que 40 es la altura total del coche con relación al suelo, es decir, 40 pulgadas o lo que es igual a 1016 milímetros. Este coche fue concebido con el fin de competir de tú a tú con el Ferrari 330 P4, así que debía de estar más o menos a la par de su rival; es por esta razón que el sistema de propulsión que equipa el GT40 parecía algo exagerado para la época, un poderoso motor V8 de 4.7 litros. Popularmente estos propulsores eran conocidos como GT40 ya que era el nombre que recibía el proyecto que tenía como objetivo preparar al Ford GT para las carreras.
Los primeros prototipos
Los primeros prototipos del GT, fueron identificados con números de serie que iban desde GT-101 hasta GT-112. Los siguientes coches construidos fueron conocidos como MK I, MK II, MK III Y MK IV, llamados de forma oficial como GT40s. Cada uno de ellos fue enumerado respectivamente como GT40-P-1000 hasta GT40-P-1145. Se conoce acerca de la existencia de réplicas de algunos MK V que fueron construidos posteriormente, y para las que se utilizaron algunas piezas originales restantes; estas versiones para los coleccionistas no poseen ningún valor del tipo económico, pero son difíciles de identificar, puesto que las piezas utilizadas lo dificultan, hace falta mucho conocimiento sobre el tema y un ojo bien entrenado para poder identificarlos.
Ganó competencias sin correr
Este no es el caso de la unidad que pretenden subastar o vender por Sotheby's, ya que este cuenta con toda la documentación necesaria que lo identifica y lo acredita como la unidad chasis número GT40-P-1016, es decir, estamos ante la presencia de una auténtica joya. Además de eso este coche puede presumir de contar con una historia fascinante ya que se trata del GT40 que ocupó el tercer lugar en el podio de la competición de Le Mans en el año 1966. Esta unidad fue restaurada de manera muy cuidadosa y así se conservaron absolutamente todos los detalles de aquella época, aspecto que contribuye de forma importante con su valor; tan excelente es su estado de conservación y apariencia que este bólido, antes de ser restaurado, participó en el famoso evento conocido como el Concurso de Elegancia de Pebble Beach en el que ganó el premio otorgado por el público en el año 2003.
Luego de conocer la extraordinaria historia de estos modelos de competición no nos queda la menor duda de que su objetivo es completamente alcanzable. De hecho, de lograr venderse por el precio que estima la casa de subastas se convertiría en uno de los coches de competición más caros jamás subastados. El precio de inicio se estima en 9 millones de dólares, y el precio tope debería superar sin problemas los 12 millones de dólares. Estaremos atentos al final del evento para enterarnos de la suma final en la que se vendió este magnífico ejemplar.
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