Por lo que su capacidad se vería insuficiente, teniendo que recurrir a otras plantas para poder sostener dicha cifra de producción necesaria.
Se espera que el nuevo SUV de Bentley, cuya llegada está anunciada para el año 2016 aumente la producción de la firma británica al menos un 50 por ciento, mientras que Lamborghini, en el caso de que finalmente tenga luz verde el proyecto de SUV que ya hemos visto adelantado en la forma del concept Urus vería la necesidad de aumentar hasta en un 100 por cien.
Antecedentes
Lo cierto es que no sería la primera vez, ya que Volkswagen fabrica el Bentley Continental Flying Spur en la misma factoría en la que se produce el Phaeton en Alemania, mientras que Lamborghini recibe también de ese país las carrocerías del nuevo Huracán, al igual que Porsche, que se limita a realizar el ensamblaje final del SUV Cayenne, tras haber recibido todo previamente de la factoría donde se realizan los VW Touareg y Audi Q7, en Eslovaquia.
Fuente: De Telegraaf vía Autoblog
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