Polo Storico es la división de coches clásicos de Lamborghini, la cual tiene como principal objetivo la restauración, mantenimiento y puesta a punto de los ejemplares de la marca que bien sea por su historia, aspecto o rareza representan una página importante en la historia de la firma europea. Sabemos que Lamborghini cuenta con una historia muy rica en lo que respecta a coches deportivos, inclusive se han dado el tupé de ponerse en las mismas condiciones e inclusive superar a la propia Ferrari, aunque a muchos les cueste aceptarlo. Sabiendo estos detalles Polo Storico está llevando a cabo una tarea muy importante. Se trata nada más y nada menos que devolverle sus días de gloria a uno de los ejemplares considerados más raros de la marca, en este caso, un Lamborghini Miura SVR del año 1974.
El Salón de Ginebra, lugar donde se presentó varias veces
Antes de comentarles acerca del excelente trabajo de restauración que ha realizado este departamento, es bueno contarles de forma muy breve algo relacionado con la historia, el saber cómo nació este espectacular vehículo deportivo. El Lamborghini Miura fue presentado por primera vez ante el público en 1966, durante la celebración del Salón del Automóvil de Ginebra. En sus inicios era conocido como P400. Contó con la aprobación inmediata del público, esto debido a que quizá equipó uno de los motores más potentes de la época, a saber, un propulsor V12 de 3.3 litros; fue tan buena la recepción que tuvo este coche que en sus primeros tres años de comercialización se vendieron cerca de 470 mil unidades.
En el año 1969 se dio a conocer a la luz pública en el mismo Salón de Ginebra, lo que se consideró como una evolución del Miura, el cual recibió el nombre de Miura S; esta nueva versión contó con un aumento de potencia en su motor, que paso de producir 350 caballos de fuerza a unos 370 caballos de poder, además de recibir ciertos ajustes en su parte estética. Solo 140 unidades de este modelo se produjeron entre 1969 y 1971, lo que dejaba a muchos en aquella época con las ganas de convertirse en el propietario de un Miura S.
Miura SV
No conformes con estos cambios la marca dio un nuevo paso en la evolución del Lamborghini Miura, pues en 1971, nuevamente en la sala de exposiciones de Ginebra se expuso una nueva versión, la cual ofrecía otro aumento de prestaciones, ya que ahora entregaba 385 caballos, además de ciertas adelantos como refuerzos en su chasis, que ahora soportaba mayor torque debido al aumento de poder, y ciertas mejoras en su carrocería, las cuales contribuirían a mejorar la aerodinámica del coche que fue tan criticada en las primera versiones. Hay que destacar que estos cambios facilitaron su entrada en el mercado estadounidense; en tan solo un año y medio se comercializaron 150 mil unidades de este modelo que recibía el nombre de Miura SV.
El modelo J
El departamento de desarrollo de Lamborghini uso el chasis del Miura para crear versiones especiales tales como el Miura Jota, el cual fue un prototipo creado para cumplir con las regulaciones de carrera de la FIA. Solo se construyó una unidad de este modelo, la cual se perdió completamente al incendiarse luego de un aparatoso accidente, en el año 1971. Como consecuencia de la buena reputación que obtuvo el Jota, en poco tiempo muchos de los clientes de Lamborghini les solicitaron la fabricación de otras unidades del jota, pero debido a los elevados costos de producción la empresa no quiso arriesgarse, así que la solución fue muy practica, les ofrecía mejorar las prestaciones , interior y estética de los Miura SV existentes, y de esta manera nació el Miura SV/J. Solo se fabricaron 5 unidades en total, de las cuales tres de ellas fueron construidas a partir de SV ya existentes y dos se construyeron totalmente nuevas en la fábrica.
Un último modelo
De allí resultaron otras creaciones del Miura, tal es el caso de la unidad en particular que es la protagonista de este artículo. En 1974 un hombre llamado Heinz Straber de origen alemán, llevo su Miura S a la fábrica de Lamborghini. Este hombre tenía muy claro lo que quería para su coche, así nació el Miura SVR, el cual es un coche único y que está inspirado en el también único Miura Jota; fueron 18 meses en total el tiempo que le tomó al personal de la fábrica de Sant´Agata Bolognese culminar la conversión del coche. Una vez culminados los trabajos su propietario lo vendió a una persona en Japón, y luego de allí ha cambiado de propietarios varias veces.
La restauración final
Más adelante, 44 años después, este particular deportivo recibió una nueva restauración y puesta a punto, pero esta vez de la mano del personal de Polo Storico, quienes serán los responsables de devolverle sus días de gloria a este coche, el cual por su condición de ejemplar único, se llevó unos 19 meses para completar su restauración. El personal técnico recibió el coche totalmente desarmado. El equipo de trabajo fue muy cuidadoso y solo utilizó piezas originales, aunque algunas de ellas fueron objeto de modificaciones. Las únicas variaciones que ha recibido este coche con respecto a las especificaciones originales son una barra antivuelcos extraíble, así como también unos asientos que ofrecen una mayor sujeción a sus ocupantes y cinturones de seguridad con 4 puntos de anclajes.
Luego de la restauración, este majestuoso deportivo fue visto en un evento organizado especialmente en el circuito de Nakayama, en el que su actual propietario, quien es un coleccionista nipón, puso especial empeño para que participara.
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