Land Rover desvela el Discovery Sport, el precursor de la nueva familia Discovery. Y es que la marca inglesa estructurará ahora su gama de modelos en tres niveles distintos: el Defender como vehículo "off road" puro, los Range Rover para el segmento de lujo y los ya mencionados Discovery, como una opción más funcional y versátil.
En concreto, el nuevo Discovery, que luce con orgullo su nombre sobre el capó y el portón del maletero, se presentará al mundo en el Salón de París 2014. Las primeras unidades no llegarán hasta principios del año que viene y su precio arrancará en los 36.350 euros. Su diseño se inspira en el Discovery Vision Concept, que Land Rover presentó el pasado abril en el Salón de Nueva York, aunque también ha conseguido gran influencia de su hermano, el Evoque, pese a que, a diferencia de este último y de sus principales rivales, el nuevo Discovery Sport estará disponible con una configuración de 5+2 asientos.
Sustituto del Freelander, estilo del Evoque
El que viene para sustituir y hacerse con el hueco del actual Land Rover Freelander no sólo rompe con el planteamiento en cuanto al diseño exterior, al tener un aire más dinámico y robusto, sino que ha aumentado sus dimensiones: sus 4,59 metros de longitud lo hacen 9 centímetros más largos que el Freelander, 8 cm más que el Evoque y 24 cm más corto que el Discovery actual. La mayor distancia con el Evoque viene de la nueva plataforma a partir del pilar B, puesto que el Discovery Sport toma como base toda la sección delantera del pequeño de los Range.
el Land Rover Discovery Sport 2015, pese a su imagen urbanita de SUV compacto preserva sus genes "off-road" que tanto han caracterizado a la marca desde sus inicios. El nuevo Discovery presenta una altura al suelo de 21,2 centímetros, además de ser capaz de atravesar vadeos de hasta 60 centímetros de profundidad. La tecnología Terrain Response completará las cualidades todoterreno del SUV, facilitando las maniobras en situaciones complicadas. Habrá versiones con tracción integral y, por primera vez en un Discovery, con tracción a un único eje.
La tecnología punta estará muy presente en el interior, el Discovery Sport incorporará el Head Up Display, sistemas de frenada autónoma o el interfaz de infoentretenimiento con pantalla táctil de ocho pulgadas y descarga de aplicaciones, que incluso permite el control remoto de algunos de los parámetros del vehículo (nivel de combustible, localización en un parking, kilometraje del último viaje...).
En cuanto a motorizaciones, se encontrará disponible desde el lanzamiento con dos motorizaciones diesel y una de gasolina. Los diesel son los conocidos motores de cuatro cilindros y 2.2 litros con 150 y 190 caballos de potencia respectivamente que ya incorporan el Evoque y el Freelander, al que sustituye el Discovery Sport. Más adelante llegará un motor ED4 de alta eficiencia, también diésel, con unas emisiones de CO2 de tan sólo 119 gramos por kilómetro. La caja de cambios podrá ser una automática de nueve velocidades o manual de seis relaciones.
Finalmente, la marca británica comenzará a recibir pedidos en octubre, tras la presentación del coche en el Salón del Automóvil de París. La llegada de las primeras unidades está prevista para comienzos de 2015, tras el inicio de su producción en la planta que Land Rover posee en Halewood, Liverpool (Reino Unido), donde el Discovery Sport irá destinado a los mercados de más de 170 países.
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