Ya sea por evitar las multas, o simplemente por motivos de seguridad al volante, los conductores españoles ha levantado el pie del acelerador en la primera semana en la que ha entrado en vigor la reducción de la velocidad a 110 km/h, en donde los radares imponían una denuncia si la velocidad de un automóvil sobrepasaba los 116,0075 km/h en cinemómetros fijos, y los 118,2885 en los móviles, según un informe jurídico encargado por la Unión de Oficiales de la Guardia Civil.
Otro motivo ha podido ser las sanciones que se imponen al sobrepasar los límites de velocidad. Con este nuevo límite, los conductores pueden ser sancionados con cien euros de multa si superan los 110 kilómetros por hora y hasta los 140; a partir de 141 y hasta 160 la multa asciende a 200 euros y, si se sobrepasan los 151, pueden perder puntos. (Ver las nuevas sanciones)Pero las realidades estadísticas han demostrados que se ha pasado de una media de 5.500 denuncias semanales entre el 14 de febrero y el 16 de marzo, hasta 2.082, durante los primeros siete días del actual límite, es decir, un 62% menos.
El afán recaudatorio que muchos preveían que iba a suponer la nueva normativa de velocidad, no se ha cumplido, al menos en la primera semana después de que fuera aprobada.
Según las declaraciones que muchos políticos y personas influyentes hacían los primeros días del mes de marzo, los datos debían haber sido totalmente contrarios
Declaraciones de todo tipo...
Bajo el lema 'No a los 110 kilómetros por hora. Contra la represión a los conductores', los manifestantes reunidos en la madrileña Puerta del Sol el 13 de marzo, protestaron por la disminución de la velocidad, por considerar que el fin de la medida es recaudar más con las multas, en palabras del portavoz de la plataforma, Pedro Javaloyes, entre 20 y 30 millones de euros más de multas en un año
Los días antes de la entrada en vigor de la nueva normativa, como ya exponíamos en otro artículo Cayo Lara (Izquierda Unida) declaraba convencido "nadie se cree que la gente va a circular a 110 kilómetros por hora». Se trata, añadió, de "una ocurrencia" con el objetivo de recaudar más con las multas antes que ahorrar en consumo de gasóleo y gasolina.
Por su parte Jose Antonio Vera (La Razón): "Lo que se ve con esta medida del gobierno absolutamente ocurrencia y absolutamente improvisada de nuevo, es que lo que se pretende es ingresar más por la vía de las multas, por la vía de perseguir a los conductores, y de cazarles cuando se sobrepasan y van a 111, 112, 115".
Así, el secretario general de la Unión de Guardias Civiles, Manuel Mato Vázquez, señaló que la reducción del límite de velocidad a 110 km/h es una "tomadura de pelo"."Se trata de recaudar, y punto".
La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal ha comentado que "Muchos españoles y también el PP Cree que hay una parte muy importante en el fundamento de esa limitación, que es el afán recaudatorio".
Por otro lado la normativa no fue aprobada por el Gobierno para disminuir el número de multas, sino como ayuda del plan de ahorro energético, por lo que sería un error considerar ahora que con ésta medida, es éste el resultado que se quería conseguir.
Hasta ahora no ha habido ninguna declaración al respecto por parte del Gobierno, aunque sí por la Dirección General de Tráfico, que prevé un ingreso de 409,37 millones de euros en multas, un 5,2% menos de lo previsto en 2010, Y si las multas siguen cayendo, los ingresos por infracciones de tráfico se verán, consecuentemente, reducidos.
Ahora hay que analizar si la reducción de éste ingreso es positiva o negativa para la actual situación del país, lo que puede poner en un compromiso a los principales partidos políticos, a la hora de opinar sobre lo que han reportado las estadísticas.
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