Hace aproximadamente seis meses, descubríamos la primera generación del Nissan Qashqai. Quisimos conocer de primera mano el exitoso SUV, justo antes de que Nissan lo renovase, y tratar así de despedirlo. Tras todo este tiempo, la nueva generación está totalmente integrada en los concesionarios, momento justo para conocer en una pequeña toma de contacto la segunda generación de este exitoso modelo.
La unidad a la que Motor&Racing ha tenido acceso cuenta con el acabado Tekna, ofreciendo un equipamiento completo. Destaca el freno de mano eléctrico, ordenador de viaje, climatizador bi-zona, retrovisores exteriores eléctricos, Nissan Connect (que incluye Apps a través del Smartphone, función Google Send-to-Car, sistema de navegación 3D, que se muestra en una pantalla de 7 pulgadas antireflectante), faros BI-LED con sistema de activación automática, asientos tapizados en piel y calefactables, cámara de visión 360 grados, o el asistente de aparcamiento automático.
Echando un ojo al equipamiento en seguridad, encontramos las clásicas siglas: ABS, ESP, EBD, fijaciones ISOFIX, y además asistente de arranque en pendiente, indicador de presión de neumáticos y el Escudo de Protección Inteligente (que integra alerta de cambio de carril involuntario, asistente de luz de carretera, identificador de señales de tráfico y sistema anti-colisión frontal, control del ángulo muerto, detector de fatiga y detector de movimiento).
Bajo el capó encontramos el 1.6 dCi de 130 CV y 320 Nm, asociado a una caja de cambios automática XTRONIC. Promete un consumo medio de 4,2 litros a los 100, y se muestra muy respetuoso con el medio ambiente, emitiendo 119 gramos de CO2.
Si buscamos prestaciones, este motor realiza el 0 a 100 en 11,1 segundos, y alcanza una velocidad máxima de 183 Km/h, datos que no son nada malos.
Pasemos a la toma de contacto.
Al abrir la puerta, es evidente el gran salto de calidad que ha dado Nissan. No solo por los materiales, sino por el ajuste y orientación de los mandos. El acceso a los asientos delanteros es muy cómodo, gracias a su posición elevada, y su ajuste se realiza mediante unos mandos eléctricos.
Una vez ubicados, encontramos una posición neutra de los mandos, pero nada escondidos. Es cierto que en la anterior generación hubo una serie de mandos que no me gustó donde estaban situados, pero la segunda generación lo corrige por completo.
Toqueteando los materiales, podemos apreciar que predominan los materiales blandos en la parte superior del tablero de abordo, dejando el tacto duro en la parte inferior, como viene siendo una norma. Esta unidad equipa asientos de cuero, lo que aumenta la sensación de calidad en cada rincón.
Un detalle que sin duda me ha llamado mucho la atención, es la iluminación ambiental que encontramos en la consola central. Aporta un toque distinto al interior, y ayuda a crear un buen ambiente, ofreciendo algo diferente.
Pasemos a los asientos traseros, y al acceder encuentro un aspecto que considero mejorable. Con mi 45 de pie, me cuesta un poco pasar al interior, ya que este se "traba" entre el pilar B y el asiento trasero. Pese a ello, creo que es un detalle sin importancia y anecdótico, una vez comprobamos la gran amplitud de la que disponen los pasajeros.
Hay espacio más que suficiente para las piernas, la altura al techo es perfecta, y los asientos son muy confortables. Además, cuenta con un apoyacodos central que ayudará a hacer mucho más confortable el viaje si solo viajan dos personas en los asientos traseros.
Se sigue respirando calidad, y aunque los materiales de tacto duro predominan en cada rincón seguimos encontrando un tacto muy agradable.
Salimos para ver que encontramos al abrir el portón del maletero, y encontramos nada menos que 430 litros muy bien organizados a través de un falso fondo, que además, permite contar al Qashqai con una boca de carga totalmente plana, pese a que sigue habiendo más espacio debajo.
La unidad a la que hemos tenido acceso sale por unos 31.150€ según el configurador. A este precio, debemos sumar los extras que escojamos, así como descontar el Plan PIVE 6 si nos acogemos a él.
Llegados a este punto ¿Qué me ha parecido el nuevo Nissan Qashqai? Esta toma de contacto me ha ayudado mucho a descubrir el gran salto generacional del Qashqai. Ha ganado en diseño y calidad, así como practicidad. No puedo valorar en profundidad el Qashqai respecto a sus rivales (ya que todavía no lo hemos probado), pero en parado, Nissan demuestra que el segmento SUV sigue siendo todo suyo.
Agradecimientos a Auto Taller Caldecas (Castuera, Badajoz) por permitirnos esta toma de contacto
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