Una de las novedades de Jaguar Land Rover para la semana de Pebble Beach era el nuevo Range Rover Sport SVR, que la marca desvela por completo anunciándolo no solo como el más rápido y potente de la historia de la compañía, sino como el SUV de producción más veloz en haber realizado una vuelta al trazado de Nürburgring.
El V8 de 5.0 litros sobrealimentado de la firma gana 40 caballos para esta versión, quedando una potencia de 550 caballos, lo que permite al SUV realizar el 0 a 100 en tan sólo 4.,5 segundos, cifras más propias de un deportivo que de un enorme vehículo todoterreno.
Identidad deportiva
La nueva versión deportiva del Range se distingue fácilmente por los llamativos cambios que adornan su carrocería. Pasos de rueda ensanchados, paragolpes delantero con entradas sobredimensionadas y trasero con difusor integrado, cuádruple salida de escape y las enormes carcasas coloreadas de las pinzas de freno firmadas por Brembo, que se dejan ver a través de las enormes llantas, de serie de 21", opcionales de 22".
El interior goza del mismo nivel de lujo y confort que el resto de las versiones, en el que destacan los asientos deportivos de piel bitono y diversos añadidos en aluminio y fibra de carbono.
Desarrollado en el Nübrurgring, pretende plantar cara a lo más granado del segmento, con el plús, según afirma la marca, de mantener sus cualidades off-road. Algo de lo que no pueden presumir la mayoría de SUV actuales.
En el trazado alemán obtuvo un tiempo de 8 minutos y catorce segundos, el más bajo cronometrado a un vehículo de estas características. El vídeo de la hazaña lo podéis disfrutar al pie del artículo.
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