Nuevo Tesla Model X 75D, ahora con 30 Km más de autonomía

Vaya semanita que llevamos con Tesla. Hace escasos días la marca de origen norteamericano presentaba por todo lo alto el Model 3, un sedán eléctrico para todos los públicos. Los fans de la marca lo celebraron solicitando más de 300.000 pedidos en las primeras horas y ayer, la compañía dio a conocer el restyling del Model S.

Ahora, Tesla ha introducido ligeros cambios en el Model X, el SUV eléctrico de la empresa, con mejoras en la autonomía, equipamiento y mecánica. El Model X 70D pasa a denominarse 75D, nombre que indica al capacidad energética de sus baterías, pasando de los 70 kWh de la versión 2016 a los 75 kWh de la variante 2017. Esto supone una mejora en la autonomía final del vehículo, llegando a homologar 381 Km frente a los 354 Km del pasado mientras que en opción, por 3.000 dólares, es posible adquirir un pack de baterías con 90 kWh que acerca la autonomía hasta los 530 Km.

A nivel mecánico, Tesla introduce dos motores eléctricos en el Model X 75D, uno en el eje delantero y otro en el trasero, mejorando la capacidad dinámica del vehículo sin alterar las prestaciones. Alcanza los 100 Km/h desde parado en seis segundos y al igual que el resto de modelos de la compañía, la velocidad máxima que limitada electrónicamente a 210 Km/h.

De serie, el Tesla Model X se ofrece con cinco asientos, todos ellos individuales aunque si el cliente lo desea se pueden poner seis ó siete asientos. En el primer caso, la tarifa a pagar es de 3.000 dólares mientras que en el segundo de 4.000. También es posible solicitar un cargador de 72 amperios, por 1.500 dólares, y el hardware del piloto automático por otros 2,500 dólares.

Llamada a revisión

Por el momento, tal y como hemos podido saber, la línea de producción del Model X permanecerá cerrada debido a la llamada a revisión que ha tenido que realizar la marca a más de 2.700 unidades de este SUV eléctrico provocada por un fallo en la tercera fila de asientos. La marca afirma que en caso de realizar una frenada fuerte cabía la posibilidad que el anclaje de dicha sección se soltara, con consecuencias impredecibles para los ocupantes de los asientos posteriores.