A pesar de estas nuevas actualizaciones, lo cierto es que las motorizaciones del Opel Insignia que llegarán de la mano de un ligerísimo restlyng apenas sufren cambios respecto a la filosofía ya predominante. De hecho, en los propulsores diesel los cambios estarán marcados por la llegada de dos nuevas versiones del bloque 2.0 CDTI, que ha sido revisado y actualizado en profundidad para ofrecer dos nuevos motores que contarán con una potencia de 120 y 140 CV de potencia.
Los cambios
Estos motores además de renovar la gama sobre todo llegan con la finalidad de reducir el nivel de emisiones de la berlina de Opel, que con estos dos nuevos propulsores acreditará de manera homologada una emisión de 99 gr de dióxido de carbono por kilómetro. Aunque esta cifra se eleva hasta los 104 gramos en las versiones Sports Tourer (familiares), con estas emisiones y un consumo que desciende hasta los 3.7 litros a los 100 km, el Opel Insignia se convierte en una de las berlinas más eficientes. Con estos datos y el cambio manual de seis velocidad y su sistema Star&Stop, sin duda los nuevos motores del Opel Insignia entran de lleno para cumplir la normativa Euro 6 y la clasificación energética A+.
Como hemos dicho, los cambios en las motorizaciones no se resumen a los propulsores diesel puesto que el bloque motor 1.4 turbo de gasolina también ha sido renovado, incluyendo la tecnología SIDI y con potencia de 140 CV. El consumo medio de este motor está en unos discretos 5.2 litros a los 100 kilómetros con una caja de cambios manual de seis velocidades. Un motor mucho más suave en pretensiones, ambiciones y rendimiento que los motores diesel y que sin embargo será una gran precuela al motor fuerte de la gama, el 2.0 SIDI Turbo con 250 CV y tracción total opcional.
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