Con una infraestructura de 20 concesionarios y tres modelos en su gama (el opel Insignia, el Opel Astra y el Opel Corsa), General Motors pretendía situar a Opel un peldaño por encima de su hermana Holden, que comercializa modelos que aquí conocemos como Chevrolet, además de un "Holden Captiva 5 2WD" que conocemos en España como Opel Antara.
Pese a las bajas ventas, considero que, para ser una marca nueva en un mercado como el australiano, no esta nada mal, y que con un poco más de apoyo de General Motors, Opel hubiese conseguido posicionarse bien en los próximos años, pero lo último que esperábamos es que desde Estados Unidos hayan querido llegar a tal extremo.
No será un adiós para todos
Michelle Lang, jefa de relaciones públicas de Opel Australia, comenta que algunos modelos Opel podrían volver a comercializarse en Australia, pero relogotipados como Holden (algo similar ya ocurre en el Reino Unido, donde las versiones más potentes de Holden las comercializa Vauxhall bajo el apellido VXR).
Opel no ha sido la única retirada del Mercado Australiano, ya que hace tan solo unos meses, Ford decidió dejar de producir en Australia el mítico Ford Falcon. Esta claro que en un mercado tan pequeño como exigente como el Australiano no se puede permitir andar jugando, pero eso no quita que no sintamos cierta tristeza al conocer las noticias que nos vienen desde el otro lado del charco.
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