Uno de los momentos más emocionantes y significativos de nuestras vidas es cuando compramos un coche nuevo. La alegría de saber que estrenaremos un vehículo recién sacado de la agencia no tiene comparación, sobre todo porque si sabemos cuidarlo tendremos coche en excelentes condiciones por lo menos para unos 4 años. Sin embargo, cuando se trata de comprar un coche debemos ser realistas y entender que no todos tenemos o contamos con el suficiente capital económico para sacar un vehículo cero kilómetros. En algunos países, sobre todo los que están en latinoamerica, a veces los coches usados cuestan casi lo mismo que un coche nuevo, aunque esto obedece a diferentes razones como la corrupción, la escases de marcas, entre otras cosas.
A pesar de todo, siempre es bueno saber que existen personas conscientes que al momento de vender sus coches lo hacen a un precio accesible, pero cuando decidimos comprar un coche de segunda mano debemos tomar en cuenta ciertos factores importantes que nos indicarán que estamos realizando una compra inteligente, y que no seremos estafados y en consecuencia, perderemos el dinero. Si actualmente usted se encuentra en los planes de comprar un coche usado entonces le recomendamos seguir con atención estos consejos a nivel mecánico.
A veces cuando abrimos el capo de un coche y observamos su motor notamos todo en su sitio, con todas sus partes y piezas, inclusive hasta lo percibimos tan limpio que nos parece que está en impecables condiciones; pero no se confíe, recuerde que, como reza el conocido refrán, "no todo lo que brilla es oro" y eso aplica a todas las cosas y objetos de gran valor como los coches. En el mundo existen "lobos disfrazados de ovejas", estafadores de oficio que engañan y se valen de cualquier artimaña para convencer a las personas honestas.
Ponga atención a cada detalle
En ese sentido, "hay que ser mansos, pero no mensos", por lo que debemos examinar con atención cada detalle, y constatar que el funcionamiento del coche sea el ideal incluso con un motor que nos parezca recién sacado de la fábrica. El primer detalle, y talvez el más importante, es medir con exactitud la compresión del motor, ya que esto nos ayudará a saber si en realidad estamos comprando un coche que nos durará ciertos años sin problemas o simplemente nos están engañando. Para medir la compresión de un coche debemos seguir ciertos pasos que detallaremos a continuación, detalles que pudiéramos realizar nosotros mismo o por el contrario nuestro mecánico de confianza.
Consiga un manómetro
Lo primero que debemos tener a la mano es un manómetro, el cual nos indicará el nivel de la compresión del motor. El manómetro es, por así decirlo, una especia de herramienta que nos indica con números el nivel de presión de ciertas cosas, pero en este caso en concreto lo utilizaremos para medir la compresión del motor del coche que queremos comprar. El manómetro lo podemos conseguir por alguna web de ventas de internet o simplemente visitando alguna tienda que se especialice en la venta de accesorios de coches.
Encienda el motor
Ahora proceda a encender el motor, y dele algunos minutos hasta que se caliente normalmente. Es importante destacar que este procedimiento no se debe realizar con el motor en frío, porque no arrojaría los datos más certeros. También es importante ponerse guantes, recuerde que su motor estará caliente y con las altas temperaturas del bloque pudiera quemarse. Si lo desea puede dar una vuelta, y luego detenerse para realizar este procedimiento.
Apague el motor, use guantes
El próximo paso es apagar el motor. Luego, con los guantes en nuestras manos, procedemos a desconectar los cables de alta tensión de las bujías, pero recuerde, debe llevar el orden para luego saber dónde va conectado cada cable; en ese aspecto es recomendable que usemos nuestro teléfono móvil y tomemos una fotografía, de esa manera no se nos olvidará la posición de cada uno. Ahora toca desconectar una a una las bujías, para ello usaremos un saca bujías adecuado. Luego de extraer la bujía enroscaremos la punta del manómetro en el orificio donde va ubicada la bujía. Este procedimiento se debe realizar de la mejor manera, para ello cerciórese de que la punta del manómetro tape por completo el orificio de la bujía.
Mida todas las bujías
Lo que viene es pedirle a alguien que encienda el motor y acelere de manera constante por algunos segundos; es así como se mide la compresión de esa y todas las bujías, por ello, este paso se debe realizar en cada una de las bujías. Es importante revisar cuales son las medidas del fabricante, de hecho, asegúrese de que todas las bujías transmitan el mismo resultado. La diferencia entre cilindros de motores a gasolina puede ser de 1.5 bar.
Recomendaciones finales
Como vemos, medir la compresión del motor de un coche no es nada del otro mundo, siempre y cuando contemos con las herramientas adecuadas para realizar cada paso. Si luego de realizar la medición de cada bujía usted notó que una o varias de ellas no coinciden seguramente entrará en un dilema, llevarlo a un mecánico de confianza para que le dé un informe más detallado, o simplemente descartar ese coche para evitar gastos adicionales que seguramente no estén presupuestados. Nuestra humilde recomendación es descartar ese coche y buscar otro, más vale conseguir un coche que realmente valga la pena que gasta un dinero para luego ganar un dolor de cabeza innecesario.
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