Buscar un sustituto para el 911 fue durante mucho tiempo un quebradero de cabeza para los ingenieros de Porsche, temerosos de que este envejeciera y se quedara atrás con respecto a la competencia, por lo que sobre todo durante las primeras tres décadas del modelo no fueron pocas las veces que incluso se llegó a plantear su eliminación de la gama, esto provocó el nacimiento de modelos como el extinto 928.
La particular arquitectura del 911, con el motor suspendido tras el eje trasero, además de suponer un hándicap prestacional, complicaba en exceso las posibilidades mecánicas durante el desarrollo de las siguientes generaciones del popular deportivo.
Prototipo secreto
Recientemente, Porsche ha desvelado uno de los prototipos laboratorio, no visto hasta ahora, en el que la marca experimentaba con la posibilidad de implementar un motor de 8 cilindros para conseguir una versión más potenciada del 911.
El prototipo, denominado Type 965, empleaba un V8 de 32 válvulas procedente de Audi, y su desarrollo fue paralelo en el tiempo al del 959. Como este último, el prototipo estaba planeado para contar con tracción integral y suspensión activa, aunque de continuar su desarrollo, el modelo de producción se hubiera situado por debajo del 959.
Desarrollado en 1984, el proyecto fue cancelado finalmente en 1988, debido a los altos costes y a la poca viabilidad industrial del modelo, derivadas de la complejidad del modelo.
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