Para la gran mayoría de nosotros adquirir un coche es una de las experiencias más emocionantes de la vida. Se dice que en muchos casos, cuando compramos nuestro primer coche, la sensación es muy similar a cuando nos enamoramos por primera vez, sobre todo si nos costó mucho trabajo llegar hasta ese punto; obviamente para todos no ocurre de la misma manera, ya que debemos tomar en cuenta las miles de personas en el mundo que han corrido con la suerte de que su primer automóvil ha sido parte de un regalo de cumpleaños o un gesto de aprecio por parte de los padres, la familia o la propia pareja sentimental.
Es un hecho, lo que nos cuesta dinero y esfuerzo se aprecia más que lo regalado, no en vano existe un refrán muy popular en algunos países de Latino América que reza "a caballo regalado no se le miran los colmillos". Comprar un auto no siempre significa que iremos a un concesionario a gestionarlo ya que todos no contamos con el suficiente capital o poder económico para sacar un vehículo nuevo, de agencia. La gran mayoría de las personas de clase media-baja juntan dinero o piden prestado a la hora de comprar un coche, y generalmente lo adquieren usado.
Invertir para ganar
Aunque parezca mentira en la mayoría de los casos comprar un coche usado o de segunda mano resulta en una especie de inversión a ciegas, inclusive, hay quienes dicen que los autos usados son una especie de lotería. Pero nadie invierte para perder su dinero, sin embargo, debemos tener en cuenta que, cuando compramos un vehículo usado, nos exponemos a que realmente se encuentre en óptimas condiciones, o por el contrario, a que venga con ciertas mañas o daños ocultos que luego de cierto tiempo comienzan a generar un sinfín de problemas que en muchos casos terminen de hacernos gastar más dinero de lo que nos costó el mismo coche.
Esté siempre alerta
Es por ello que la recomendación al comprar coches usados es estar siempre alertas y evitar estafas que nos lleven a perder nuestro patrimonio. Existen muchas maneras de saber en qué condiciones está un vehículo usado, tanto a nivel mecánico como en lo que respecta a cuidado físico, pero talvez la más importante es consultar a nuestro mecánico de confianza quien a la final nos podrá indicar si ésta inversión terminará valiendo la pena o no.
La parte mecánica
Lo primero que debemos hacer es asegurarnos de que la parte mecánica esté en buenas condiciones generales; en este punto será necesaria la presencia de un mecánico especializado, quien se encargará de revisar a fondo el coche, y en muchos casos, con herramientas propias para tal fin. Los expertos en mecánica generalmente hacen algunas mediciones para constatar que la compresión del motor sea la adecuada, recuerde que este es uno de los factores que determina la vida de cualquier propulsor. Si luego de algunas mediciones y chequeos preventivos se logra constatar que la compresión del motor está bien ya habremos dado el primer paso, y quizá el más importante, ya que nos aseguraremos de que el motor de este vehículo aun cuenta con mucho tiempo para funcionar sin mayores inconvenientes.
La chapa del coche como seguridad
Otro de los factores importantes tiene que ver con la chapa del coche, aquella que guarda los seriales de la carrocería. Este punto es de consideración, no solo porque nos permitirá saber si el vehículo ha sufrido algún golpe, sino porque además podremos saber si el auto en realidad es un coche legal o se trata de un vehículo robado. Hay aparatos costosos que prueban con certeza de que la chapa del coche no ha sido cambiada o adulterada, y generalmente se recomienda ir a los cuerpos de seguridad para que ellos lo puedan verificar tanto de manera física como por sistema.
Lleve a un latonero o enderezador profesional
Aparte del mecánico también es bueno contactar un latonero o enderezador de confianza, recordemos que ellos trabajan enderezando, por así decirlo, los golpes o fracturas que sufren los coches cuando son impactados por algo. El buen enderezador o latonero estará en la capacidad de decirnos si el automóvil en cuestión ha sido golpeado o chocado y mal reparado; a muchas personas les ha pasado que luego de comprar un coche que físicamente se veía bonito resulta que había sufrido un golpe de consideración, y luego constatan de que las piezas fueron mal montadas o mal reparadas, a tal punto de que la misma latonería comienza a "abombarse" o "inflarse" y luego tiende a podrirse.
Revisiones finales
Otras revisiones que nosotros mismos pudiéramos hacer antes de comprar un coche se basan en revisar detalles como los vidrios del coche, ya que todos deberían ser del mismo fabricante porque así los entregan cuando el coche sale de la agencia, caso contrario nos indicaría un posible siniestro o una reparación. Sea observador y revise también los tornillos del habitáculo, cerciórese de que no tienen marcas. Como detalle final nunca está de más que se agache por debajo del coche y observe si no hay algún bote de fluidos o restos de pintura. Además observe si hay alguna manguera suelta desde donde se aprecie aceite o humo, eso indicaría que ese vehículo está botando la compresión y habrá que hacerle el motor.
Aunque nos emociona decir que vamos a comprar un coche, bien sea por gusto o necesidad, siempre que compre un coche usado no pierda de vista estos detalles, recuerde que su dinero producto de su esfuerzo vale más que cualquier cosa, no se lo regale a estafadores de oficio.
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