A Renault no le ha gustado nada que Seat le haya arrebatado su récord de Nürburgring con el nuevo León Cupra 280, por eso ha dado un golpe de efecto y ha presentado el Mégane Sport más potente visto hasta la fecha: el Mégane RS 275 Trophy.
Renault no ha querido que se quede todo en una simple preparación de motor. Basado en el restyling, el Mégane RS 275 Trophy recibe distintos adhesivos que permiten destacarle de un Mégane RS "normal".
Se beneficia de unas llantas de 19 pulgadas denominada Speedline Turini, bañadas en color negro.
En su interior nos aguardan unos baquets Recaro tapizados en piel y alcántara, combinado con unos pespuntes rojos que también se han adaptado a la baqueta trasera.
También recibe un volante y palanca de freno de mano específico, bastante diferenciado del que encontramos en el Mégane RS normal.
La parte mecánica, mejorada profundamente
Basado en el chasis Cup con diferencial limitado, el nuevo Mégane RS 275 Trophy ve incrementada su potencia en 10 CV, gracias al buen trabajo realizado por los ingenieros. El conocido 2.0 que equipa el Mégane RS ofrece ahora 275 CV a unas 6.800 RPM, y contará con un par motor de 360 Nm, disponible entre 3000 y 5000 RPM.
Pese al aumento de potencia, Renault nos asegura que ni el consumo ni las emisiones se verán afectadas.
La colaboración con Akrapovic ha sido determinante en el diseño y creación de la línea de escape, construída íntegramente en titanio. Esto aporta ligereza y mejora el sonido del motor, volviéndolo bastante más bronco.
Se fabricará en la factoría de Palencia, y se comercializará en unos 20 países, entre los que se encuentra España, donde comenzará a llegar a sus clientes a partir de septiembre.
Todavía desconocemos en cuanto ha conseguido parar el crono de Nürburgring, pero nos sorprendería si, tras tanto bombo, no consigue alcanzar al Seat León Cupra 280.
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