El Renault Megane Sedán sufre una serie de modificaciones que le ponen al día y le permiten mantenerse atractivo y a flote en su vida comercial. Entre esas novedades que ha experimentado podemos mencionar que le ha sido aplicado un lavado de cara, así como también incorpora lo más reciente en tecnología en materia de seguridad indispensables para los vehículos actuales junto a una revisión en su sistema multimedia y navegación. También es importante acotar que su mecánica ha sido mejorada con la adición de un nuevo propulsor de tres cilindros con 1.0 litros.
Diseño exterior elegante
En su frente el cambio se refleja con una nueva parrilla que adquiere elementos cromados junto a un paragolpes rediseñado. Sus ópticas incorporan tecnología LED 100% Pure Vision que ofrece mayor eficiencia en carretera junto a luminarias Renault C-Shape. Los deflectores de aire se ha colocado en la parte delantera de los pasos de rueda para mejorar la aerodinámica. Hacia sus lados, sus manijas de las puertas han sido iluminadas y destacan nuevas llantas de aleación entre las 16 y 18 pulgadas. Finalmente en su saga tenemos nuevos diseños en los pilotos LED y escapes adornados falsos.
En su interior destaca un grupo de instrumentos digitales reflejados en una pantalla de 10,2 pulgadas que anexa navegación por GPS. Su sistema multimedia dependiendo del equipamiento puede medir hasta 9,3 pulgadas y está conectado con sistema EASY LINK, MULTI-SENSE compatible con Android Auto y Apple CarPlay. Su ergonomía mejora con la ubicación de los controles en la consola, poniéndose más accesibles para el conductor, mientras que su asiento se ajusta eléctricamente. Por su parte, los modos de conducción disponibles son: Eco, Comfort, Sport y MySense. También hay una ambientación con nuevos colores y una aplicación R Sound para el sonido del motor.
En cuanto a seguridad, se beneficia de crucero adaptativo con función Stpo & Go, frenado de emergencia con detección de peatones, alerta de tráfico cruzado y la función Auto-Hold del freno de estacionamiento que permite en la ciudad mantener el vehículo detenido mientras el conductor libera el pedal del freno. En materia mecánica se estrena el nuevo motor a gasolina tricilindrico 1.0 TCe que arroja 115 CV, mientras que la opción a diésel corresponde al Blue dCi de 1.5 litros con salida de 115 CV.
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