El interés de las marcas europeas por los llamados mercados emergentes es innegable, y buena prueba de ello es el hecho de que por primera vez en su historia, Renault haya presentado un Concept Car fuera del viejo continente. Concretamente ha sido en el Salón del Automóvil de Nueva Delhi, donde la marca del rombo ha dado a conocer el KWID Concept.
El Renault KWID Concept mezcla en un solo vehículo cualidades muy distintas. Es fácil catalogarlo como un SUV, por su aspecto robusto, y el amplio ángulo de ataque tanto en la parte delantera como trasera del vehículo. Pero sus ruedas cercanas a las esquinas hacen que nos recuerde también a un buggie carrozado.
Sus formas musculosas dan cabida a un motor de 1,2 litros de cubicaje, turboalimentado, aunque también está preparado para albergar un sistema de propulsión eléctrico, con hueco para las baterías, e incluso un conector para el cargador escondido tras el logotipo de Renault en la parte frontal. El motor térmico se asocia a una caja de cambios EDC que se acciona desde el volante.
Pensado para la India
El exterior del Renault KWID Concept está especialmente pensado para los usuarios indios. Mezcla el color gris en el capó, paragolpes, y puertas, con el amarillo y dorado de sus llantas, tomas de aire, y el techo. Son los colores corporativos de la marca francesa, pero en el país asiático además el gris representa la tierra, y el amarillo y dorado representa las flores y las especias tan utilizadas en ese país.
Además, los clientes indios son grandes aficionados a la tecnología, por lo que el Renault KWID Concept reúne todos los últimos avances en este apartado de la marca del rombo. Una tablet integrada en el salpicadero permite controlar todo el apartado multimedia y de climatización en el vehículo, además de muchos otros parámetros. Por otro lado, una pantalla vertical tras el volante hace las veces de cuadro de mandos.
Un interior lejos de la realidad
Pero, a pesar de todo, el interior del vehículo está muy alejado de la realidad. Sus asientos presentan una curiosa configuración, con tres pasajeros en la parte delantera, incluido el conductor, que se ubica en el centro y ligeramente adelantado, y dos en la parte trasera. Cuentan con una decoración inspirada en un nido de pájaro, con líneas que se entrecruzan a lo largo y ancho de los asientos, y de los paneles de las puertas.
El habitáculo está gobernado por el color blanco, aunque también tienen cabida los mismos colores del exterior, el gris y el amarillo dorado. La iluminación interior es de tipo LED, mientras que las puertas se abren hacia arriba de forma eléctrica.
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