Cuando escuchamos hablar de Rolls Royce lo primero que se nos viene a la mente es prestigio, confort y categoría. Y es que en efecto, esa es la imagen que se creó la marca a lo largo de los años, categoría de primera clase, lujo y exclusividad para los clientes más exigentes del planeta, aquellos que tienen con qué conseguir lo mejor, económicamente hablando. La historia de Rolls Royce es muy interesante y trata de cómo dos socios unieron sus pasiones para lograr unos coches realmente impresionantes. Su aporte a la historia del mundo automotriz, a la aviación e incluso, al automovilismo fue trascendental y dio pie para que otros fabricantes buscaran la excelencia en todos sus diseños.
En la actualidad la firma británica se mantiene en el top de los coches más exclusivos del mundo, de hecho, siguen siendo muy enfáticos, celosos y muy exigentes en lo que a calidad se refiere. Recientemente diseñaron y lanzaron al mercado un modelo llamado Rolls Royce Dawn, un coche que impresionó por todas sus cualidades, siguiendo las líneas tradicionales de estética y finura. Sin embargo, desde la marca pensaron que el Dawn necesitaba un toque juvenil y rebelde, por ello, decidieron diseñar y sacar al mercado una versión más deportiva para atraer a un público más tradicional.
Así fue como nació el Rolls Royce Dawn Black Badge, un descapotable descomunal y que hecho, fue presentado ente el mundo en el famoso Festival de la velocidad de GoodWood en su edición 2017. Resulta que es una versión especial del Dawn, y lo primero que llama la atención de este bólido descapotable es su gran tamaño, el cual llega a los 5,3 metros de longitud. Black Badge es un paquete de mejoras que en 2016 se aplicó a otro modelo conocido como el Cupé Wraith.
Motorización
Sus prestaciones mecánicas también mejoraron notablemente con el nuevo paquete, y un ejemplo muy claro de ello es que la cantidad de potencia que genera su motor pasa de los 570 caballos de poder a 601 caballos y 840 Nm de par. Nada mal para un vehículo con semejantes características, sobre todo por su peso y tamaño. El Rolls Royce Dawn Black Badge tiene un gran peso de 2,6 toneladas, de hecho, está catalogado como uno de los coches descapotables más pesados del mundo. Con todo, sigue sus líneas tradicionales, y a pesar de tener un aire y espíritu renegado, no deja de lado sus encantos.
El nuevo Roll Royce Dawn Black Badge es capaz de alcanzar de 0 a 100 kilómetros en tan solo 4,9 segundos, eso nos indica que tan potente es su motor, tomando en cuenta el gran peso que debe mover desde la arrancada. Este vehículo cuenta con una caja de cambios automática de 8 velocidades. La velocidad máxima del Dawn Black Badge no ha sido desvelada, pero se cree que, por la cantidad de caballos de poder en su motor, podría sobrepasar fácilmente los 300 kilómetros por hora. Otro detalle del cual no se habló es de su interior, aunque se piensa que no debe sufrir grandes cambios motivado a que la versión original ya contaba con todos los adelantos a nivel tecnológico como para sustituirlos.
Detalles finales
Pero uno de los detalles más llamativos en esta edición especial es su nuevo sistema de escape que tiene una función especial llamada "low". Al activar esta función, el sonido que emana del motor se torna más grave de lo normal, algo que les atrae a los amantes de los coches conocidos como súper deportivos. La capota del Dawn Black Badge es de color negro, con algunas inserciones en color naranja, la parrilla en cromo oscuro y un tono black pulido para el resto de la carrocería.
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