Rolls-Royce Wraith, coupé de lujo y estilo retro

Rolls-Royce ha querido sorprender a propios y extraños en su exposición en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra con un nuevo modelo que ha conjugado tres términos que no parecían estar asociados en un principio. Hablamos del nuevo Rolls-Royce Wraith, un modelo dinámico, con potencia y que destaca sobre todo por ser capaz de juntar en un único coche toda la elegancia y el lujo que es alma característica de los coches de Rolls-Royce, con un estilo más trasgresor, dinámico y potente en forma de un diseño fastback situado en modas del pasado. Una ruptura entre un interior impecable y un exterior más agresivo, así es el nuevo Rolls-Royce Wraith.

Potencia y comodidad

EL nuevo Rolls-Royce Wraith cumple esta premisa gracias al motor más espectacular jamás montado en un Rolls-Royce. Se trata de un motor V12 con una transmisión de 8 velocidades automática ZF. El motor 6.6 entrega un total de 624 CV de potencia y 465 kW gracias a sus dos turbos y desarrolla esta potencia a 5.600 rpm, siendo como hemos dicho el motor más potente de su historia y derivado del que se puede encontrar en el Ghost. Con estos datos, no es de extrañar su enorme par motor de 800Nm con una entrega suave pero contundente en el régimen medio de vueltas.

En aceleración, este dinámico Rolls-Royce también nos sorprende pues es capaz de llegar a los 100 km/h en 4.6 segundos a pesar de su peso de 2.360 kg, con una velocidad punta limitada electrónicamente a 250 km/h. Sin embargo, toda esta potencia y agresividad no se transmite al interior del coche, gracias a la suspensión del vehículo de carácter neumático con control electrónico, capaz de leer el asfalto cada 2,5 milisegundos. Con esta sensación de conducir en una "cámara de aire", este Rolls-Royce además incluye un revolucionario sistema en la caja de cambios.

El sistema ya mencionado recibe el nombre de Satellite Aided Transmision (SAT) y consigue que la caja de cambios ZF sea la primera caja de cambios guiada por tecnología GPS. De esta forma, esta innovadora tecnología que todavía no se conocía en el mercado interviene en la selección de marchas así como analizando la posición y el estilo de conducción, interviniendo discretamente en la forma de actuar del coche ante motivos externos como una carretera de montaña o la conducción por autopista. Este sistema se espera que llegue a otros modelos del Grupo BMW gracias a una tecnología que proviene de la F1.

Para complementar estas tecnologías, el Wraith trae un montón de ayudas a la conducción como un sistema de visión nocturna capaz de identificar obstáculos, iluminación adaptativa, llamada de emergencia en caso de accidente, control de velocidad crucero adaptativa, cámaras con visión de 360º y muchos extras a nivel interior, que como siempre llevan la comodidad del conductor y los pasajeros hasta los cánones más altos posibles.

Trasgresor visualmente

Sin dejar de lado el lujo, el refinamiento y la artesanía que inspiran a cada modelo de Rolls-Royce, este nuevo Wraith muestra en su exterior un carácter único con un toque retro. Carrocería fastback es el término más destacado en este nuevo modelo derivado del Rolls-Royce Ghost, eso sí, siendo más corto y más ancho que su hermano. Con los habituales toques sobrios y elegantes de la marca, gana en dinamismo con una caída del techo destacada, dos tubos de escape presentes en la zaga del coche y sobre todo unas llantas enormes.

En el interior, todo ese dinamismo se convierte en elegancia y lujo con tonos acres de cuero de alta calidad, inserciones de madera Canadel Panelling y los ya mencionados puntos de fibra óptica que llegan hasta los 1.340 para simular un cielo estrellado. La tecnología tampoco falta en su interior con una pantalla de 10,25 pulgadas, sistema de navegación por voz, panel táctil y un equipo de sonido de 1.300 watios, con 18 altavoces.