Constituida desde las bases que se asentaron en el organismo franquista del Instituto Nacional de Industria en 1950, fueron necesarios tres años para que desde la línea de montaje, los operarios ensamblaran por completo el primero de los más de 16.000.000 de vehículos que el fabricante establecido en tierras catalanas ha fabricado en sus más de 60 años de vida
Con un precio por encima de las 121.000 pesetas, al cambio actual, para los más jóvenes, unos 720 euros, se ensamblaban incialmente durante el primer año, tan solo cinco unidades diarias, al finalizar 1954 se habían entregado casi 1.000 unidades, lo significativo es que ya existía una lista de espera de hasta 10.000 peticiones en firme, lo cual supuso todo un impulso a la motorización de la sociedad que se recuperaba de la Guerra.
El coche de España
El 1400 no solo se convirtió y tuvo en las familias españolas como su principal destinatario ya que los diferentes organismos públicos, necesitados de vehículos oficiales, lo incoporaron a su parking móvil como también ocurrió con el sector del taxi, extendiéndose su imagen por las crecientes capitales provinciales y grandes ciudades del país.
El fin de la vida del 1400 llegó más de 10 años después de que la primera unidad fuera montada y tras ella llegaron otras 98.000 más, además existieron tres generaciones, la última fue la C con la que se puso fin a su fabricación.
Desde Motor y Racing felicitamos a la marca SEAT y a aquellos pioneros encargados de que hoy podamos celebrar el sesenta aniversario de ese memorable momento de la industria del autómovil nacional.
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