Seat completa la gama León con el ST

Está claro que la tercera generación del Seat León ha supuesto un gran cambio de mentalidad en la marca española. Si en las dos primeras generaciones el León tan solo se ofrecía en carrocería de 5 puertas, y sin más opciones, esta tercera generación ha significado la llegada de la añorada versión tres puertas, llamada SC, y ahora de una versión familiar, que hasta ahora parecía reservada para los Exeo, e Ibiza.

El nuevo Seat León ST alcanza una longitud de 4,54 metros, 27 centímetros más que el León cinco puertas, con lo que el espacio del maletero crece desde los 380 litros hasta 587 que nos ofrece esta nueva carrocería. Abatiendo los asientos traseros, llegaremos a disponer de 1.470 litros de capacidad de carga, que aún pueden ampliarse en algunas versiones abatiendo el asiento del acompañante.

A pesar del aumento de tamaño, el nuevo Seat León ST no ha crecido demasiado en lo que se refiere al peso. En sus versiones más básicas tan solo ha aumentado su peso en 45 kilos, lo que sitúa su peso en solo 1.233 kg, con lo que se convierte en una de las opciones de menor peso del mercado, lo que repercute directamente en un menor consumo y emisiones.

Más opciones dinámicas y de seguridad

Pero en Seat no se han limitado a alargar la carrocería del nuevo León, y trabajar en una reducción de peso. También han decidido incluir algunas mejoras a nivel dinámico y de seguridad. El Seat León ST llegará al mercado a finales de año, y desde ese momento la marca española pondrá a disposición de sus clientes un nuevo control de chasis adaptativo en toda la gama León.

Este control de chasis adaptativo ofrece al conductor tres modos de conducción que podremos elegir gracias al sistema Seat Drive Profile. Tendremos los modos "Eco" y "Comfort", que como sus propios nombres indican favorecen un menor consumo, y una mayor comodidad, respectivamente. No puede faltar tampoco el modo "Sport", más ágil y rígido que el resto de modos.

Otra novedad que llegará a la gama del compacto español será el control de velocidadd adaptativo, que nos permitirá mantener una velocidad predeterminada de entre 30 y 160 kilómetros por hora, manteniendo la distancia de seguridad respecto al resto de vehículos mediante un sistema de radar.