El pequeño utilitario de la filial de Mercedes se renueva y busca afianzarse entre los más sibaritas conductores de ciudad. Con sus 2,69 metros de largo y 1,66 de ancho, el Smart Cabrio busca ser el ejemplo a seguir por todos los utilitarios.
Su techo se asemeja al del ya desaparecido Citroën C3 Pluriel, con unas barras laterales que sirven de guías a un techo de lona corredizo. Con solo pulsar un botón y en tan sólo 12 segundos, el techo se pliega y deja entrar la luz al habitáculo, incluso circulando a máxima velocidad.
Si el conductor lo desea, puede desmontar las barras laterales para disfrutar de todo un descapotable. Se ha buscado hacer el techo lo más cómodo posible además de aumentar la cantidad de luz que puede entrar por el mismo.
Para hacer al Smart Cabrio más seguro para sus pasajeros, se ha incrementado en un 15% la dureza de su estructura, con pilares más gruesos y refuerzos en su parte inferior.
En cuanto a motorizaciones, el fortwo cabrio poseerá inicialmente dos variantes. Un motor 71 CV y otro de 90 CV, ambos de 3 cilindros, compondrán la oferta de motorización en su lanzamiento.
Un utilitario ya establecido
El Smart Fortwo Cabrio cumple 15 años en el mercado. Smart, marca afiliada a Mercedes, se afianzó en el mercado al sacar un utilitario exclusivo muy útil para las grandes ciudades, de reducido consumo y grandes calidades.
Nacido en 1998, este pequeño utilitario ha sido destacado por sus características de tamaño y elegido en muchos casos para ser modificado. Es el caso del Smart que montaba el motor de una Suzuki Hayabusa y que dejó en la cuneta a tantos otros superdeportivos en carreras de aceleración.
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