Mucha gente, en nuestra época escolar, hemos pasado horas dibujando en una hoja en blanco en el pupitre de clase la casa con el garaje perfecto, el coche ideal o el circuito más divertido jamás creado por el ser humano. Por eso luego, intentábamos ensamblar con las piezas de construcciones esos sueños y que se materializaran dando siempre un resultado final muy por debajo de nuestras expectativas.
Eso puede que empiece a ser cosa de un pasado arcaico y, como la tecnología ha demostrado avanzar de modo exponencial, incluso un lejano recuerdo de quienes no podían trasladar lo que su imaginación a un coche de verdad, todo gracias a uno de las más revolucionarias creaciones de los últimos años: las impresoras 3D.
Desde las prótesis ortopédicas, armamentística, decoración de hogar, alimentación o sector textil... la automoción no podría menos y ya es uno de los campos donde las impresoras capaces de construir piezas tridimensionales ya son una realidad.
El pionero
El autoproclamado primer fabricante de coches hechos por impresora 3D existe y se llama Local Motors, el cual ha llevado al Salón del Automóvil de Detroit su creación, el Strati, un coche que se fabrica incluso en plena cita para demostrar que ya es posible construir fuera de una megaplanta industrial convencional un vehículo.
El proceso lleva un total de 44 horas de impresión, aunque declaran estar trabajando para bajarlo a 24, integrándose al final del ensamblado menos de 50 piezas.
Los coches que Local Motors proponen son eléctricos, de hecho usa la mecánica y baterías del Renault Twizy, y aprovechan el bajo peso de sus carrocerías para que estos motores no se vean comprometidos ya que el 80% del coche está realizado en plástico y el 20 restante en fibra de carbono dando en total un peso aproximado final de 680 kilogramos.
Personalización total
Uno de los atractivos de esta propuesta es que ellos o tú mismo puedes diseñar y fabricar tus accesorios o complementos, la misma impresora 3D que dará vida a tu coche podrá crear todo aquello que tu imaginación esté dispuesta a proponer (tu cartera a pagar y las autoridades a legalizar).
Y es que el coche estará totalmente legalizado para circular por los EE.UU., país de origen de esta empresa, a lo largo de este mismo 2015 lo que no sabemos es si tienen planes de homologar este peculiar vehículo fuera del país norteamericano.
El precio del único del modelo comercializado por la empresa parte de los 18.000 dólares a los 30.000, dependiendo, evidentemente, de los acabados y extras elegidos como las llantas exclusivas firmadas por Fifteen52.
Un nuevo modelo de producción
Y es que lo más destacable de esta propuesta no es ni la belleza del modelo (ninguna), ni las especificaciones mecánicas (adaptadas y heredadas del conocido urbanita francés), ni siquiera su precio (elevado), sino que se abre la posiblidad a un nuevo tipo de fabricación en serie capaz de revolucionar la construcción de vehículos, no solo de coches, y de recambios ¿imagináis ir al taller y no tener que esperar a que les envíen desde la central lo que vuestro coche necesite ya que la impresora 3D allí presente pudiera materializarlo casi al momento?
Local Motors puede que haya sido tan solo el primero de una serie de pequeñas empresas que vayan creciendo o siendo adquiridas por grandes corporaciones que vean en la impresión 3D la nueva u otra vía de fabricación automovilística por lo que estaremos atentos a las novedades que presente la nueva era de la impresión.
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