Parecía imposible, pero es un hecho. Toyota ha reconocido que han cometido un gran error en el pasado que consistía en no creer en la autonomía eléctrica y la movilidad urbana mediante energías renovables. Eso les llevó a tener un importante problema, el cual se acrecienta especialmente en el momento de llevar los coches a la venta y a la producción. Por ello, ahora han encontrado la manera de ganarle el terreno perdido a otras marcas, y lo harán con unos coches que sorprenden por su gran autonomía en cada una de sus distintas funcionalidades.
Ha estado tiempo en silencio, pero ahora se han puesto las pilas y dos décadas después de comenzar a hacer coches híbridos se ha consolidado con un impresionante trabajo de desarrollo en el sector de los coches eléctricos, todo ello centrándose en la nueva tecnología que implementarán próximamente. El gigante japonés se muestra confiando en este gran avance, el cual permitirá reducir el tamaño de sus coches, junto al coste de las nuevas baterías y el peso de las mismas. Eso hará que el precio de venta sea significativamente más bajo de lo que se está vendiendo en este momento, siendo un gran aliciente para los usuarios.El gran avance se prevé que se realice en el sector del proceso de producción de baterias. Con ello, se reducirán los costes de las baterías de iones de litio de base liquida, con lo que se consolidarán en un mercado que necesita este tipo de productos y que ofrecerá una gran revolución en el sector.
Planes de futuro
El pasado mes de junio, Toyota sorprendía a todos con su revolucionario mensaje y ese no era otro que el lanzamiento de su primer coche que vendrá con una batería de estado sólido para el 2027, eso si, dos años antes la veremos en acción de la mano de sus coches hibridismos. En ese sentido, han estado trabajando de la mano de Panasonic, que cuentan con una amplia experiencia en el sector. Con esta revolucionaria tecnología conseguirán tener coches de 1200 km de autonomía y que se recarguen en unos 10 minutos.
Artículos recomendados